Cómo prevenir una gran dimisión en las empresas españolas
Existe una máxima que por desgracia se olvida con frecuencia en el mundo laboral: la mejor manera de que una compañía sea productiva es teniendo motivada a su plantilla.
En la búsqueda de un mayor rendimiento y productividad los responsables de tomar las decisiones a veces descuidan la importancia de que sus empleados estén adaptados, felices e identificados con la empresa. Por eso se genera un desarraigo en muchos de ellos que desemboca en su marcha a otra compañía (o en su deseo de irse); o, por lo menos, en una menor motivación y un rendimiento laboral inferior.
¿Cómo conseguir trabajadores identificados con la compañía en la que trabajan? La startup Woffu aporta varias claves interesantes que recogemos aquí:
El talento se cultiva y alimenta, no se retiene. El primer error a veces reside en la expresión retener talento, un enfoque quizás inadecuado pues el término atañe a ejercer poder sobre el trabajador para que se quede, no a motivarle y darle herramientas para que decida seguir al sentirse identificado con la empresa y sus objetivos.
Hacer más llevadero y entretenido el trabajo. Hay que procurar no complicar la vida a los empleados, detectando las carencias existentes y mejorando los procesos, algo fundamental en esta época de cambio. Valorar la salud física y mental de la plantilla y cuidar de su motivación personal y profesional, teniendo en cuenta -además de una adecuada adaptación al teletrabajo si fuera el caso- valores como conciliación, diálogo, desconexión digital e incluso diversión. Puede trabajarse en un entorno laboral responsable y profesional sin dejar de lado el buen humor y generándose un ambiente natural, cercano y distendido.
Escuchar a los empleados
La comunicación debe ir en dos direcciones, no sólo en una. Escuchar a los trabajadores, desde sus inquietudes a sus ideas sobre el trabajo, confiando y apoyándose en su criterio, no sólo desemboca en buenos resultados, sino en que la plantilla sienta que se le tiene en cuenta y aumente su implicación. Además, es importante la comunicación entre el personal, aunque sea de distintas generaciones, pues promueve el buen ambiente laboral, la suma efectiva de talentos distintos y una eficiente dinámica de trabajo en equipo. Buscar espacios de comunicación entre los trabajadores también es muy positivo.
Promover el talento interno. Hay que valorarlo y promoverlo, formando y dando puestos de responsabilidad y/o un aumento de sueldo o algún otro incentivo a quienes han estado tanto tiempo al pie del cañón si así lo merecen. Quizás no sea necesario realizar un proyecto de selección para incorporar a alguien de fuera pues la persona adecuada está ya en la empresa.