Garantía mecánica: la cobertura adicional de los coches usados

Centramos nuestro artículo ‘motorizado’ en una clase de seguros -o en una cobertura adicional, dependiendo del caso- del ramo del automóvil que no son muy conocidos ni hacen demasiado ruido, pero pueden ser de gran utilidad en numerosas situaciones relacionadas con el vehículo.

Estos seguros pueden interesarnos en muchos escenarios, tanto si contamos con un vehículo en propiedad y queremos hacer uso de él, como en el supuesto de que optemos por venderlo o de que no tengamos coche y pretendamos comprar uno de primera o segunda mano. Nos referimos al seguro de garantía mecánica, un producto que puede ser independiente o formar parte de las coberturas adicionales de algunos seguros de auto. Sirve para cubrir las averías fortuitas que puedan sufrir los componentes mecánicos, eléctricos y electrónicos del vehículo asegurado.

Como ya conocen, al comprar un coche -como sucede, prácticamente, con numerosas adquisiciones de primera mano- este suele contar con un periodo de garantía, normalmente en torno a los dos años, el que se cubren de manera gratuita las averías que puedan producirse en el vehículo durante ese tiempo. Y también saben que los seguros de coche se encargan, en función de la cobertura contratada, de responder ante los daños producidos a causa de posibles siniestros.

La combinación de ambos datos arroja un nuevo hecho: acabado el periodo de garantía, ni la aseguradora ni el fabricante ampararán los daños en el coche que no hayan sido consecuencia de un siniestro. Esta situación depara que, para curarse en salud completamente ante posibles futuras averías del coche, algunos particulares decidan contratar un seguro de garantía mecánica.

A quien puede interesar

A grandes rasgos, existen tres clases de situaciones en las que pueda interesar comprar un seguro de garantía mecánica o suscribir esa cobertura adicional: si se compra un coche nuevo y se quiere seguir cubierto una vez concluya la garantía del fabricante; si se vende un vehículo a otro particular y se pretende ofrecer más seguridad e incentivos a posibles compradores; o si se compra un auto de segunda mano y se quiere uno curar en salud ante la posibilidad de que el vehículo adquirido no se encuentre en un estado ideal.

En cuanto a las averías que se cubren dependerá de cada compañía, aunque les podemos informar de cuáles de ellas están incluidas en la cobertura de un seguro de garantía mecánica habitualmente. Este tipo de productos suelen proporcionar soluciones ante averías que afecten a componentes del motor (rotura de la correa de distribución, caja de cambios, bloque de motor, culata, cigüeñal, árbol de levas), del sistema de refrigeración (calefacción, ventilación, bomba de agua, termostato), del sistema de alimentación (encendido, turbo, escape, depósito) y del sistema eléctrico, como el alternador, las luces, los interruptores de elevalunas o los motores de asiento.

Por el contrario, suele quedar excluida la sustitución de componentes del vehículo que puedan sufrir desgaste por uso: pastillas o discos de freno, líquidos, embrague... De cualquier manera, la obligación como cliente es conocer qué respuesta concreta ofrece cada aseguradora en materia de garantía mecánica y elegir entre ellas.

Obligaciones del asegurado

La persona que contrata este seguro tiene una serie de derechos gracias a él pero también contrae algunas obligaciones con la compañía aseguradora, especialmente si quiere hacerse acreedor a la cobertura disponible.

El propietario del vehículo no podrá acceder a los beneficios de esta garantía si no ha probado convenientemente que ha cuidado del mismo y se ha preocupado de su puesta a punto, pues obviamente la aseguradora no va a hacerse cargo de cualquier avería fruto de descuido, negligencia, desgana o maltrato del cliente a su propio coche. Eso se traduce en que la persona interesada debe hacerse cargo de llevar al día el libro de mantenimiento del automóvil, así como conservar la factura de la última revisión realizada y tener a mano los documentos pertinentes, como pueden ser el permiso de circulación o la ficha técnica.

Por último, resaltamos que no muchas compañías ofrecen esta garantía y que las que lo hacen no la brindan en las mismas condiciones ni de la misma manera. Por ejemplo, el seguro de garantía mecánica de AXA incluye la cobertura de las piezas que hacen posible el desplazamiento del coche, una indemnización por estas y por la mano de obra y asistencia en carretera con vehículo de sustitución; o el de Race, que se compromete a la devolución del 100% del coste en las reparaciones más comunes y brinda otras coberturas como asistencia en carretera, vehículo de sustitución, reparación in situ o remolcaje. Por su parte, Mutua Madrileña cuenta con la cobertura gran reparación en algunas de sus modalidades de seguro, que está destinada a cubrir averías del motor o del módulo electrónico de control del motor.