Un fin de verano perfecto en Alanda Marbella
En plena ‘milla de oro’ marbellí, entre el casco antiguo y Puerto Banús, el hotel Alanda Marbella reabre sus puertas con nueva decoración y una propuesta gastronómica excepcional.
Fue al principio de este verano cuando el hotel Alanda Marbella estrenó diseño, decoración y un nuevo concepto integral de estilo de vida, descanso y salud. Aunque estemos ya en septiembre, el clima marbellí nos permite prolongar el verano y disfrutar de este maravilloso oasis urbano (a 5 minutos de la playa) y de su filosofía gastronómica orientada hacia lo natural.
Sus 193 habitaciones -de alto standing, incluidas tres presidenciales y un penthouse-, todas ella con terraza y orientadas a la costa, a la montaña, a los jardines o a piscina del hotel, han sido decoradas de manera exquisita y minimalista, respetando al máximo los espacios luminosos y el confort. Están equipadas con todas las comodidades y disponen de la última tecnología al servicio del cliente.
‘Intelligent Gastronomy’: el concepto
Alanda Hotel Marbella cuenta con cinco puntos de restauración abiertos tanto a sus clientes como al público general, orientados siempre hacia el bienestar del huésped, la hospitalidad y el compromiso con el entorno natural.
El restaurante Aceituna se ubica en la terraza del hotel, en el centro de un jardín tropical, rodeado de palmeras. Se trata de un espacio íntimo con música de ambiente, cocina en vivo y abierto todo el año, perfecto para disfrutar de un delicioso desayuno buffet con opciones para todos los gustos y cualquier intolerancia alimentaria.
Manuka es la opción flexitariana: vegetariana, pero elástica. Su carta, a base de alimentos naturales, libres de azúcares refinados, aditivos y químicos, apoya la dieta vegana y vegetariana, aunque también ofrece carne de corral y otras alternativas orgánicas para quienes no siguen esta cultura.
Junto al lobby del hotel, la Crepería evoca a los pequeños cafés parisinos. Chic y sofisticada propone una rica variedad de crepes artesanales dulces y saladas, tartas caseras y postres, tés, cafés y zumos naturales, siempre a base de ingredientes frescos y de calidad.
Casi al borde de la piscina infinita, con efecto playa, reina el sabor italiano de la cocina de La Pérgola, que cuenta además con una barra en la que se preparan los mejores cócteles sin alcohol de Marbella, muy en línea con el carácter healthy del hotel.
Reuniones y eventos
En la planta baja, Alanda ofrece una amplia variedad de espacios funcionales para eventos y bodas con capacidad para hasta 250 asistentes y hasta 300 en disposición de cóctel. En la entrada de las salas se puede utilizar el vestíbulo para cócteles y coffee breaks, comidas y cenas de empresa. El salón Alisio, con luz natural y una terraza independiente, permite organizar presentaciones, banquetes y celebraciones, almuerzos o cenas informales.