Así beneficia la Inteligencia Artificial al seguro

El seguro se sube al tren de la digitalización, agilizando su capacidad de respuesta ante el cliente mientras simplifica procesos haciéndolos más eficientes.

Con todavía mucho camino por recorrer ya se va comprobando hasta qué punto la Inteligencia Artificial puede resultar de gran utilidad tanto para las compañías como para los asegurados, aportando el impulso que necesita el sector de cara a conseguir un salto de calidad necesario y adaptarse a la evolución constante que demanda esta época. Vamos a analizar brevemente en qué medida la Inteligencia Artificial está transformando, generalmente a mejor, el entorno asegurador, ayudados por un certero análisis realizado por kabel.es sobre esta cuestión.

A grandes rasgos, el objetivo es mejorar la experiencia del cliente gracias a servicios personalizados y automatizados, así como a una gestión más rápida y eficiente de las reclamaciones y procesos. ¿De qué manera? Por ejemplo, progresando en cuanto a predicción y gestión de riesgos en colaboración con las insurtech. Una dinámica cuyos frutos pueden verse claramente en el ramo de automóviles, donde las compañías de seguros aprovechan la telemática para recopilar datos de conducción de los vehículos en tiempo real con algoritmos de aprendizaje automático.

En materia de salud también son palpables los avances en IA: los proveedores de servicios usan el lenguaje automático para ayudar a los pacientes a elegir las opciones de cobertura de seguro médico que más se ajusten a ellos y sus necesidades. Por otro lado, la gran cantidad de información recopilada por wearables permite aconsejar más certeramente al usuario sobre pautas de ejercicio, alimentación y vida saludable en general.

La programación neurolingüística también empieza a despegar y su implementación permite reducir el tiempo de respuesta a las consultas de los clientes y encontrar rápidamente información en casos de tramitación de siniestros o reclamaciones. Una parte del trabajo se automatiza (por ejemplo, gracias a los chatbots de servicio al cliente) y el resto sigue realizándose por trabajadores especializados, lográndose un equilibrio entre humanos y tecnología que esperemos perdure.

Otro de los campos que ha evolucionado significativamente es la visión por computador, lo que permite a las máquinas extraer el significado y el contexto de los datos visuales. Ello es gracias a las redes neuronales, modelos de Inteligencia Artificial que pueden reconocer y clasificar imágenes con una fabulosa precisión.

Y, por último y no menos importante, a las aseguradoras la gran cantidad de datos disponibles y los algoritmos de aprendizaje automático les sirven de gran ayuda a la hora de detectar y prevenir el fraude por parte de los clientes que quieran hacer trampas, parando los pies a los que juegan sucio y ahorrándose una gran cantidad de dinero.