Claves para viajar seguros con nuestras mascotas

Si decidimos que nuestra mascota venga con nosotros de vacaciones debemos tener varios factores en cuenta. Cumpliéndolos podremos disfrutar de un plan estupendo acompañados de nuestro inseparable amigo

La sociedad ha avanzado significativamente en los últimos años hacia un mayor respeto a los animales de compañía, buscando además adaptarse para ofrecer más facilidades tanto a éstos como a sus dueños en el día a día. Por eso no nos faltarán opciones para disfrutar si queremos irnos de vacaciones junto a nuestra mascota; pero también deberemos cumplir con una serie de obligaciones.

En lo que respecta al viaje, recordamos que en cualquier medio de transporte (coche, avión, barco, tren, autobús...) el uso de trasportín o jaula es obligatorio durante el desplazamiento. Habrá que conocer los requerimientos específicos de cada medio y de la compañía responsable, siendo consciente de que el animal seguramente vaya a pasar un mal rato y procurando que éste sea lo menos desagradable posible.

También deberemos procurar llevar con nosotros toda la documentación pertinente de la mascota: la cartilla sanitaria si viajamos dentro de España, el Pasaporte Europeo para Animales Domésticos si nos desplazamos a algún país de la UE y, en líneas generales, cualquier certificado que demande el lugar de destino; por supuesto, tendremos que haber cumplido con el calendario de vacunación del animal y llevar a este siempre identificado, bien mediante un microchip electrónico o con la chapa de toda la vida con el teléfono de contacto de los dueños en caso de pérdida; y llevar durante las vacaciones -o comprar en nuestro lugar de destino- la comida y bebida y los medicamentos y objetos que precise nuestro acompañante.

No podemos dejar de recomendarles la contratación de un seguro para mascotas, que les pueda cubrir económicamente en caso de que su animal acuse tantos cambios de golpe o el stress que le genera el desplazamiento y su comportamiento se altere -algo relativamente frecuente, especialmente durante el viaje- y provoque algún incidente. En ese sentido la cobertura de responsabilidad civil puede ser realmente útil, como también lo es (en otro aspecto) la de asistencia veterinaria.

Por último, como apuntábamos antes, el mundo está progresivamente más preparado para acoger a los animales de compañía y ampliar sus límites. Cada vez hay más espacios públicos, hoteles e incluso restaurantes que autorizan su entrada -de manera cursi llamados pet friendly-, así como playas en las que está expresamente permitido el baño de los perros. Informarse acerca de donde podrá y donde no estar el animal es una labor obligada a la hora de planificar el viaje.