Jan van Eyck vive en el Museo de Bellas Artes de Gante

En 2020 se conmemoran 600 años desde que las pinturas de Jan van Eyck deslumbraran en Flandes. Una visita virtual a la exposición conmemorativa es imprescindible

Este 2020 se perfilaba allá por el mes de enero como el gran año dedicado a Jan van Eyck. El maestro flamenco, el más célebre de los Primitivos pintores del norte de Europa, nació en la Baja Edad Media, entre 1385 y 1390, probablemente en Maaseik. Sin embargo, las primeras noticias acerca de su trabajo datan de 1420 -de ahí la celebración del sexto centenario-. Se encontraba entonces en La Haya, pero poco después, tras la muerte del emperador, regresó a los Países Bajos del sur.

Por este motivo, las ciudades flamencas especialmente vinculadas con su vida y su obra -Gante y Brujas, donde falleció poco antes del 13 de junio de 1441 según la cuenta destinada a sus funerales en la iglesia de San Donaciano- programaron una serie de actos y exposiciones dedicadas al maestro.

Mientras que en el Groeningemuseum de Brujas se presentaba a principios de marzo una muestra centrada en las dos obras de van Eyck custodiadas por el museo (Virgen del canónigo Van der Paele y el Retrato de Margarita van Eyck), la gran cita artística se situaba en el Museo de Bellas Artes de Gante que reunía por primera vez en la historia diez de las únicas veinte pinturas conservadas en la actualidad.

Van Eyck. Una revolución óptica abrió sus puertas según lo previsto el pasado 1 de febrero. Ante la imposibilidad de visitar la exposición y también de la prórroga de la misma -las instituciones prestamistas no prolongan el lapso del préstamo-, el museo propone una visita virtual para conocer en profundidad, además de las tablas mencionadas, otras piezas de su taller, copias de cuadros perdidos, así como miniaturas, esculturas y dibujos de la Baja Edad Media.

Las piezas centrales de la muestra son los recién restaurados ocho paneles exteriores del Políptico de la Adoración del Cordero Místico, que regresarán en los próximos meses a la catedral de Gante para no salir ya jamás del lugar para el que fueron realizados. La restauración del célebre políptico de San Bavón comenzó en 2012 en una de las salas del MSK. Aquello supuso toda una revelación de colores, detalles, datos y curiosidades escondidas bajo capas y capas de suciedad y barnices.

Contextualizado el mundo del siglo XV y la obra de Van Eyck, el visitante se sumerge en la riqueza y el nivel de detalle de su revolución óptica. Esta transformación de las técnicas pictóricas se aprecia en tres facetas: su técnica al óleo, su observación del mundo y su pintura de los fenómenos ópticos de la luz, los reflejos y las distorsiones.