Los expertos ven poco probable que salga un brote peligroso de China

España pedirá certificados Covid-19 y test negativos a los viajeros procedentes del país asiático ante el elevado incremento de contagios.

La explosión de casos de Covid-19 en China ha puesto en vilo a Europa. Para frenar la expansión del virus, España anunció que pedirá certificados Covid-19 y test negativos a los viajeros procedentes del país asiático. Pero la realidad que se vive en España es muy distinta a la china y los expertos llaman a mantener la calma ante los buenos niveles de inmunización y vacunación que existen entre la población. Según los expertos, la variante que está circulando en China, la BF.7 ya ha estado presente en España y no ha tenido el éxito de otros linajes, como los BA.4 y BA.5, que estuvieron circulando durante todo el verano y que fueron las causantes de la última ola importante en España. “A mayor número de casos, hay más posibilidades de una mutación y de una nueva variante. Pero eso no se traduce en que vaya a haber una variante más transmisible y más grave de las que ya tenemos”, explica a este medio Jaime Jesús Pérez Martín, presidente de la Asociación Española de Vacunología (AEV).

Los inmunólogos confieren importancia al buen control de fronteras para evitar que se produzca un aluvión de infecciones en España, pero transmiten un mensaje de tranquilidad. “La medicina no es una ciencia exacta, pero las evidencias sugieren, tal y como está evolucionando este virus, que si hay mutación es para escapar de la respuesta inmunitaria. No creemos que vaya a evolucionar hacia una enfermedad grave”, dice Marcos López Hoyos, presidente de la Sociedad Española de Inmunología (SEI).

La situación actual en España muestra que el país tiene un perfil de protección muy alto por la alta cobertura vacunal y también porque muchas personas ya han pasado la infección. A pesar de ello, plenamente conscientes de lo que está sucediendo en el país asiático, las autoridades sanitarias españolas recomiendan encarecidamente que todas las personas mayores de 60 años que aún no hayan recibido la cuarta dosis vayan a inoculársela y extienden la petición al resto de adultos también.

“La humanidad española está mucho más preparada que hace un año y mucho más que hace dos. Una parte importante de los colectivos más vulnerables ya está vacunada con una dosis adaptada a ómicron y casi toda la población ha pasado alguna infección en algún momento. Por tanto, no creemos que vaya a ser una cuestión especialmente preocupante”, concluye Pérez Martín.