Solo el 3% de las farmacias venden sus productos a través de Internet

De las 22.261 oficinas de farmacia que forman parte de la red en España, 711 boticas cuentan con una página en Internet autorizada por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps) para vender online sus productos de autoconsumo, en especial los dirigidos al autocuidado de la piel

No es un secreto para nadie que la digitalización haya impactado de manera transversal en todos los sectores del país. Sin embargo, su aterrizaje no se ha llevado ni al mismo tiempo ni de la misma manera en todos ellos donde ya había demandas cubiertas. España cuenta con una red de 22.261 farmacias a pie de calle. De ellas, únicamente el 3,19% (711 boticas) tiene presencia en Internet, según datos de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Farmacéuticos (Aemps). De hecho, algunas de ellas ni funcionan.

“El porcentaje es tan bajo porque el modelo nuestro de cercanía favorece que el paciente tenga a menos de 200 metros de su casa un medicamento”, afirma el vicepresidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Juan Pedro Rísquez Madridejos. Además, si una persona necesita un tratamiento lo hace con cierta inmediatez por lo que es más innecesario tener que hacer la petición a través de la web. Las farmacias con página web no están limitadas geográficamente. No obstante, es cierto que hay un mayor número de boticas con plataformas en las grandes ciudades que en las zonas rurales.

Con la pandemia las necesidades de compra de los españoles cambiaron y se adaptaron. El Covid 19 dio viento de cola a los ingresos online de la venta de las farmacias y parafarmacias a través de la red, no obstante, cada vez se vuelve más a la normalidad y las personas siguen y vuelven a las boticas para tratar la salud. Cabe destacar que en Internet solo se pueden comprar productos no farmacéuticos, es decir de parafarmacia. “Nunca se pueden vender medicamentos de manera online ya que hay un riesgo enorme al respecto”, recalca Cofares.

En 2022, las farmacias online obtuvieron ingresos por valor de 242,5 millones de euros, es decir, un 24,8% menos que en 2021, y vendieron 23 millones de unidades, un 43,3% menos, según datos de Iqvia. Todos los tipos de productos disminuyeron su facturación, aunque destacan los dispositivos como inhaladores, pruebas Covid y termómetros, entre otros (PAC), con un 47,3% menos de ingresos (25,9 millones). Además, los tratamientos sin prescripción médica, es decir, los OTC es el grupo en el que disminuyó menos la facturación en un año, concretamente un 13,4%.

En la otra cara de la moneda, las parafarmacias online incrementaron su facturación un 32,2% (37,2 millones) respecto al ejercicio anterior y aumentaron las unidades vendidas un 19,2% hasta 3,2 millones. Los productos que más facturaron (30,5 millones) y unidades vendieron (2,5 millones) fueron los de autocuidado (PEC). Le siguen los del grupo de los relacionados con las dietas complementarias (NUT) con un aumento del 32,9% de los ingresos (3,7 millones) respecto al año 2021.

El 57% de los españoles que compran productos de autocuidado lo hacen a través de Internet. No obstante, cabe destacar que la gran mayoría de las personas que adquieren a través de la red también lo hacen presencial, principalmente en la farmacia física, y los compradores puros online de este tipo de productos representan hoy por hoy un porcentaje totalmente residual, según explica Iqvia. Además, el comprador digital suele tener una o varias farmacias físicas de referencia y suele combinarla con el uso de un canal digital para la compra de este tipo de productos.

Existen diversas razones por las que los compradores se dirigen a las webs, según un informe de Iqvia. No obstante, las principales son que en la web el producto es más barato que en las farmacias ya que puede que haya alguna oferta o promoción y la comodidad ya que se puede comprar con un solo clic en cualquier lugar y momento. Además, comprar online permite comparar productos, precios y opiniones de manera más fácil y se ahorra tiempo, es decir, no hace falta que la persona se desplace hasta el punto de venta para llevar a cabo su compra. Por otro lado, los españoles piensan que el catálogo de productos y formatos es más amplio en Internet.

Para que una farmacia pueda vender a través de la red sus productos de autoconsumo debe cumplir una serie de requisitos. En primer lugar, solo las boticas con oficina física pueden vender a través de Internet. Además, las páginas deben estar aprobadas por la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (Aemps) y contar con un sello de autorización que deberá mostrar en todos los apartados de la web donde se muestren tratamientos de venta online. También deberá obedecer en temas de seguridad, calidad y eficacia “por tratarse precisamente de medicamentos que afectan a la salud de los pacientes”, afirma Juan Pedro Rísquez Madridejos. Por otro lado, está prohibido mostrar medicamentos y productos de parafarmacia de forma conjunta. Su diferencia debe ser clara. En este punto cabe volver a destacar que en Internet solo se pueden comprar productos no farmacéuticos, es decir de parafarmacia.

La venta de productos online abre la puerta a riesgos contra la salud de las personas. El 43% de la población española utiliza buscadores de Internet para autodiagnosticarse, especialmente las mujeres mayores de 55 años y los jóvenes de entre 18 y 35 años. “Hay mucha gente que recurre a internet para consultar información médica o comprender mejor ciertos temas relacionados con la salud.”, indica Cofares. Además, puede desencadenar una automedicación por parte de las personas. Y es que, alrededor del 65% de las personas que se automedican han buscado con anterioridad información en la red.

Digitalización de las farmacias

Los farmacéuticos resaltan que la farmacia es un claro ejemplo de los procesos de digitalización y modernización que está viviendo el sistema sanitario y la sociedad en general. “No podemos taparnos los ojos ante la evolución y queremos participar en todo el proceso de modernización, pero habrá que hacerlo sobre las demandas que no están cubiertas y en este caso está cubierta perfectamente”, afirma Rísquez Madridejos.

Entre los últimos avances tecnológicos se encuentra la receta privada electrónica entre médicos, dentistas, podólogos y farmacia. También trabajan en el universo de las plataformas. “En aquellos lugares donde haya una real necesidad seremos los primeros interesados en estar y luego habrá otra zona que tendrán un menor desarrollo, como en el caso de las webs online de venta de medicamentos”, explica el vicepresidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos.

La demanda de medicamentos por parte de los pacientes está cubierta, según los farmacéuticos, ya que todo el mundo tiene acceso a la farmacia a pie de calle “de manera inmediata a cualquier hora del día y con un profesional físico que le va a atender cualquier cuestión que le plantee y le va a ofrecer información”, recalca el vicepresidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos. “Puedes buscar un producto de manera digital ya que tu driver principal será la comodidad, pero siempre es preferible un trato personalizado, un seguimiento específico y una cercanía que solo te lo da ir a la farmacia”, afirma Cofares. “La digitalización te da inmediatez, el farmacéutico te da respuesta”, añade.