Contagios y vacaciones: la saturación vuelve a los hospitales españoles

Una nueva ola de coronavirus azota a España. La virulencia no es como las anteriores pero en el caso de los profesionales sanitarios no se puede ir a trabajar, ya que pondrían en riesgo una zona sanitaria. A este problema hay que sumarle las vacaciones de verano.

Comienza el verano y con el habitual periodo vacacional, algo de lo que no se escapan los hospitales. Este año, como en los dos anteriores, los centros sanitarios volverán a asomarse al colapso. Una nueva ola de Covid asola a España y, si bien su gravedad no se acerca a las vividas anteriormente, sí que provoca bajas. Hay que recordar que entre los profesionales sanitarios sí que hay que guardar cuarentenas, ya que no se pueden permitir un brote de Covid dentro de un hospital, por lo que si a la cascada de casos se le suman las vacaciones, el problema llegará seguro.

El problema que sucederá a esta falta de profesionales serán nuevos retrasos. Hoy por hoy es muy difícil acceder a la cita con el médico de familia y una odisea llegar al especialista. A todo esto se le suman el enorme plazo a la hora de conocer los resultados de una prueba diagnóstica.

La situación no es igual en todas las comunidades autónomas, pero por ejemplo, en Madrid, la falta de profesionales estructurales se va a conjugar con los dos factores previamente descritos. Según un informe de Comisiones Obreras, para igualarse a la media nacional, necesitaría como mínimo un incremento de 3.000 millones de euros en la dotación presupuestaria, un incremento de más de 3.100 profesionales, subir a cinco camas de hospitalización por cada 1.000 habitantes y un plan real de infraestructuras.

Entre otras cuestiones que analiza el sindicato, se ha puesto el acento en que la Comunidad de Madrid está entre las que menos gasto sanitario por habitante de España. Así, fue la que mayor número de habitantes absorbió en el crecimiento poblacional del territorio nacional, su Producto Interior Bruto (PIB) es un 35,3% superior a la media nacional en 2020 y en 2021 creció un 6,5%, representando el 19,3% del PIB nacional.

Ahora, desde el Gobierno central se lanza un globo sonda avisando de la contratación fija de más de 60.000. La política sanitaria está en manos de las comunidades autónomas y sus recursos humanos también. De hecho, ni siquiera existe una fórmula de financiación finalista, por lo que una dotación que desde la administración central se trasladara a las 17 regiones no tendría por qué revertir en personas fijo.

Lo que quedará este verano serán servicios mínimos. Entre vacaciones y coronavirus no habrá mucho personal ni para absorber la demanda actual ni tampoco para restar de una ingente lista de espera. La sanidad, en los meses de julio y agosto, estará bajo mínimos.