La actividad quirúrica en oncología no recupera niveles prepandémicos

Durante el año del coronavirus, casi un 20% de pacientes de cáncer no fueron diagnosticados durante el año 2020 en España. Además, el número de pacientes que inició un nuevo tratamiento farmacológico aquel año disminuyó un 5%.

El olvido que ha sufrido el cáncer en el año y medio que se lleva de pandemia preocupa a los profesionales sanitarios. En el marco del encuentro El Cáncer No Espera, cabe destacar algunas conclusiones que ponen en relieve la necesidad de retomar el normal funcionamiento del sistema sanitario para garantizar el tratamiento a sus pacientes.

Este encuentro, que tiene su origen en la divulgación del white paper Cancer Won’t Wait desarrollado por el IQVIA Institute, donde se concluye que el cáncer pronto se convertirá en una emergencia, como lo ha sido la pandemia. “Si no damos pronto con los pacientes aún no diagnosticados por la pandemia, entonces el sistema sanitario se enfrentará a pacientes que debuten con una enfermedad más avanzada o con peor estado de salud”, se explica en el informe.

En nuestro país existen indicadores suficientes de que los diagnósticos están por debajo sobre lo que deberían ser y que se espera que, además, haya más personas diagnosticadas en estadio avanzado, incluso metastásico, y muchos ni siquiera lleguen a recibir tratamiento. En España las cirugías programadas de estos pacientes oncológicos que no se llevaron a cabo ascienden a más de 31.000 en nuestro país frente a datos del 2019.

El Ministerio de Sanidad español publicó en febrero de 2021 algunas iniciativas para afrontar el reto que ha supuesto la pandemia y garantizar un sistema sostenible a largo plazo y que pretenden mejorar la eficiencia del sistema sanitario centrándose en maximizar el uso de los recursos y garantizar al máximo la continuidad de los servicios sanitarios y la investigación clínica. Isabel Ricote, manager de oncología en IQVIA, destacó que “según fuentes internas disponibles, se estima que desde el inicio de la pandemia se han diagnosticado 62.000 pacientes oncológicos menos de lo esperado según referencia de 2019. Esto tendrá claras consecuencias tanto en la supervivencia a medio y largo plazo, como en el aumento de la complejidad del manejo terapéutico de estos pacientes”, añade.

Durante la mesa redonda celebrada durante el encuentro, Mariluz Amador, directora médica de la Asociación Española Contra el Cáncer, señaló que “es prioritario animar a la gente a que acuda a la consulta ante la aparición de síntomas, ya que muchos indicadores confirman que muchos pacientes no acuden a consulta por miedo a la Covid-19, incluso una vez pasado el colapso del sistema”.

Las estimaciones de población indican que el número de casos nuevos aumentará en las dos próximas décadas hasta 29,5 millones al año en 2040, según recoge el informe Las cifras del cáncer en España 2020, de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM). Antes estas preocupantes previsiones, la prevención es una de las mejores armas, junto al diagnóstico precoz, sobre todo teniendo en cuenta que un retraso en el diagnóstico aumenta considerablemente la mortalidad. “Es muy importante que la gente vaya al médico si tiene algún síntoma extraño y que continúe con sus sesiones y campañas de diagnóstico precoz para detectar cualquier enfermedad a tiempo. No hay que tener miedo”, advierte el director general de GenesisCare en España, Brendan Capell.