Sergio Rodríguez, director general de Pfizer España: “La fábrica de Puurs produce ahora más de 150 millones de dosis de vacuna para el Covid al mes”

La vacuna contra el Covid es seguramente el medicamento más importante y más conocido de la historia reciente. La farmacéutica que mejor ha rentabilizado su suero ha sido Pfizer, quien además se ha asegurado en Europa un papel determinante para 2022 y 2023

Hace un año, Sergio Rodríguez recibía a elEconomista para contarle que en breves semanas llegaría su vacuna. Era finales de octubre y pocos días después, el 9 de noviembre, la FDA daba el visto bueno a su suero. El resto es una historia de éxito tanto humano como empresarial, donde Pfizer ha vacunado a medio mundo.

Se va a cumplir un año desde que la FDA diera luz verde a la primera vacuna contra el Covid. ¿Cuál es el balance que hace hoy la compañía?

El balance es muy positivo. Si miramos dónde estábamos hace un año, lo que había era una esperanza muy alta en que la ciencia pudiera llegar a un resultado que permitiera salir de algo tan terrible como la pandemia que estábamos sufriendo. Este año ha demostrado lo que supone la ciencia, la importancia de la colaboración y cooperación, y la equidad, porque se está trabajando mucho para que haya justicia en la distribución, con todos los condicionantes y dificultades que existen. Las tasas de vacunación son muy altas en los países desarrollados y se está trabajando para incrementarlas en países con menores ingresos.

Uno de los puntos neurálgicos de las vacunas ha sido la fábrica belga de Puurs. ¿Cuántos millones de dosis salen de allí y cuántas se destinan a iniciativas solidarias?

Nosotros tenemos dos grandes líneas de fabricación. Una está en Estados Unidos, que ha suministrado para ese país y ahora también lo hace en América Latina y Canadá. La otra cadena de producción está en Europa.

Puurs produce ahora más de 150 millones de dosis al mes. Hasta la fecha, Pfizer ha enviado más de 633 millones de dosis a la Unión Europea. En Puurs se hace la parte final de la fabricación, pero hay dos fábricas más en Alemania y tenemos acuerdos suscritos con Novartis y Sanofi para incrementar la capacidad de producción. Además, hay otro acuerdo con Biovac, en Sudáfrica, para suministrar vacunas allí.

Desde Puurs se ha atendido a toda la demanda de Europa y del resto del mundo. De allí han salido vacunas para Oriente Medio y Asia. Este año, el compromiso es llegar a 3.000 millones de dosis con las dos líneas de producción y el año que viene alcanzar los 4.000 millones. De esos 4.000, 2.000 irán a países de bajos ingresos.

La vacuna es fruto de una alianza. ¿Cuándo se fijó Pfizer en BionTech?

Hace tres años empezamos la colaboración. Por lo que empezamos a trabajar con ellos fue por la tecnología de ARN mensajero. La vacuna de la gripe que nos ponemos hoy está desarrollada en base a las cepas prevalentes de hace dos años. ¿Qué ocurre? Pues que a veces esas cepas no son las que prevalecen dos años después. Por tanto, empezamos a trabajar con ellos para ver si éramos capaces de desarrollar una vacuna para la gripe teniendo en cuenta que la tecnología de ARN mensajero permite en tiempos muchos más cortos desarrollar vacunas que son efectivas contra variantes nuevas. Ahora hemos retomado con ellos el desarrollo de vacunas contra la gripe.

Ese fue el origen, se estaba trabajando con ellos cuando llegó la pandemia y se dirigieron todos los esfuerzos para luchar contra este nuevo virus.

Pfizer ha firmado con la UE el envío de hasta 1.800 millones de vacunas para 2022 y 2023. Es un número que sirve para vacunar a toda la población. ¿Prevén hacerse con todo el mercado?

No lo sé, eso es decisión de Europa. Lo que nos ha pedido es garantía de suministro. Entiendo que estarán hablando con todos los laboratorios.

Lo que sí sé es que el compromiso que tenemos para este 2021 se ha cumplido y que gracias al aumento de capacidad que tenemos cumpliremos tanto con Europa como con el resto de países con los que se han firmado acuerdos, incluyendo Covax.

¿Cuáles son las previsiones de ingresos de Pfizer con la vacuna?

Las previsiones de ingresos se han incrementado. Lo que se anunció eran 22.300 millones de ingresos, ahora pensamos que se alcanzarán los 28.800 millones, aproximadamente.

Ahora llega el debate sobre la tercera dosis. Hoy por hoy, tanto su empresa como la de Moderna van con ventaja a la hora de adjudicarse la nueva inyección. ¿Cree que le ganarán el pulso a la nueva hornada de vacunas?

La decisión es de las autoridades. Nosotros seguimos aportando información y estudios. Tenemos varios ensayos clínicos con la vacuna que seguiremos compartiendo con las autoridades para que tomen la mejor decisión posible.

Donde sí tienen más competencia es en el tratamiento contra el Covid. Ahí MSD les ha adelantado.

Más que competir, de lo que se trata es de aportar más soluciones. Nosotros estamos pendientes de tener más resultados, nuestros estudios van más retrasados que los de ellos. Lo que sí puedo decir de este mercado es que no sabemos el tamaño que va a tener ni la durabilidad que tendrá.

Con las vacunas se ha visto una celeridad sin precedentes en las agencias reguladoras. ¿Confía en que a partir de ahora sea más fácil el camino para los medicamentos innovadores?

No se puede extrapolar lo que ha pasado y decir que los medicamentos se pueden sacar en un año. Eso no es real. Pero lo que sí ha ocurrido es que todo el proceso administrativo, que se lleva meses y años, se puede acortar. Es verdad que el foco de las agencias ha estado al 100% con el Covid, y eso no es realista tampoco porque hay muchas áreas de trabajo. Pero sí que se podrían acortar los plazos, beneficiando a todo el mundo.

Si se acortan esos plazos, que en España alcanzan de media los 15 meses desde que Europa aprueba, ¿podría facilitar una bajada de precios de los medicamentos?

No lo sé, pero hacer el sistema más eficiente significa hacerlo en todos los sentidos. Pero no puedo extrapolarlo al precio. Lo que sí tiene implicaciones es para la calidad de la salud. Es algo de lo que deberíamos concienciarnos todos: acortar la parte administrativa sin quitarle rigor al proceso. Cuando presentamos dosieres, detrás hay siempre estudios farmacoeconómicos que se hacen y se seguirán haciendo.

En verano, tuvieron que retirar Champix, su famoso medicamento para dejar de fumar. ¿Lo van a volver a comercializar?

No los sabemos. Hubo una revisión por parte de las agencias reguladoras por los niveles de nitrosaminas. Se ha retirado y ahora debatimos sobre lo que necesita el producto.

¿Cuáles son los planes de la compañía en términos de lanzamientos de productos y estrategia empresarial?

Pfizer ha culminado un proceso de transformación cuyo objetivo era soltar tamaño para focalizar el negocio. “Salió el negocio de consumo, que hoy es una joint venture con GSK.

El negocio de maduros, que teníamos dentro del paraguas de Pfizer con UpJohn salió también y se fusionó con Mylan, en lo que se conoce ahora como Viatris. Todo esto tenía por objetivo focalizarnos en biotecnología e innovación.

Ahora tenemos seis áreas terapéuticas: medicina interna, vacunas, enfermedades raras, antiinfecciosos, inflamación y oncología. Nuestro objetivo, en los próximos cinco años, es poder lanzar los 25 nuevos medicamentos que tenemos en cartera. Todas las unidades de negocio están creciendo.

¿Se verán operaciones de compra de compañías o de productos de pequeñas biotecnológicas en el medio plazo?

Desde hace años trabajamos para potenciar estas seis áreas terapéuticas que tenemos, tanto orgánicamente como inorgánicamente. No hemos dejado de hacer en ningún momento adquisiciones. Pfizer, en los últimos cinco años, ha mostrado ser muy activo en la incorporación de productos o compañías biotecnológicas. ¿Hay planteamiento de grandes compras? No lo sé, pero no lo parece.

España trata de ser un nuevo actor importante para el sector farmacéutico. ¿Qué planes tiene Pfizer aquí?

Invertiremos algo más de 70 millones de euros en nuestra fábrica de Madrid. Ya hay un edificio nuevo, se va a instalar una nueva zona séptica, dos liofilizadores de última generación y se va a llevar ahí toda la producción y se va a incluir la terapia génica, que se fabricará en España para toda Europa. La inversión no acaba en el 2021, sino que continuará tanto en el 22 como en el 23.

Nuestra voluntad es seguir creciendo en la producción de esta fábrica, que ha demostrado a lo largo de los años que es flexible y con un alto índice de calidad. Internamente, es una de las mejores fábricas del mundo de Pfizer.

En la planta de Madrid, ¿cuánto volumen se exporta hacia otros países?

De todo lo que se fabrica, el 95% es para exportación. Ahora mismo producimos medicamentos para la hemofilia y lo exportamos para todo el mundo.

Fabricar en España medicamentos esenciales para los sistemas sanitarios es una de las tareas que ha dejado la pandemia. La dependencia asiática en ciertos fármacos maduros es muy alta y los países europeos quieren recuperar producción. La cuestión aquí es si España puede competir.

Aquí tenemos 82 fábricas de medicamentos, tanto de productos innovadores como de genéricos. Capacidad tenemos y voluntad hay. Dentro del Perte sanitario que se ha aprobado está el proyecto Medes, que impulsó Farmaindustria junto a otras asociaciones, donde se han puesto sobre la mesa proyectos por valor de 1.720 millones de euros.

No se trata de crear un entorno proteccionista, sino de asegurar que hay capacidad suficiente de producción de medicamentos esenciales para asegurar la salud. Esa inversión también genera crecimiento, genera riqueza y también genera ciencia

Sin embargo, las deslocalizaciones de empresas comenzaron a producirse a medida que se ajustaba el precio de los medicamentos maduros. ¿Esperan cambios en la política farmacéutica?

Estamos en un mercado regulado y los precios que existen están acordados con la administración. No se trata de perder dinero, se trata de asegurar la producción en un entorno que sea razonable.

En España tenemos compañías de genéricos muy potentes, con esa base podremos crecer sin necesidad de que se rompa el mercado.

¿Qué nos puede decir de la amenaza de la resistencia a los antibióticos?

Está aquí y es grave. Estamos trabajando en el desarrollo de nuevos antibióticos. Es una pandemia silente.