La suma de todos es lo que aporta valor a la sanidad

El sector sanitario privado es un importante aliado estratégico del sistema público de salud, contribuyendo de manera muy significativa a la sostenibilidad del sistema y a la consecución de objetivos fundamentales para la sanidad como son la equidad, la sostenibilidad, la accesibilidad y la calidad en la atención sanitaria. Asimismo, el sector sanitario privado es un agente fundamental en nuestro país en términos de generación de bienestar, riqueza y contribución al desarrollo económico y social.

El sector sanitario privado dispone de un gran número de centros de diversa finalidad que facilita la accesibilidad de la población a la atención sanitaria. La sanidad privada dispone de una dotación de 458 hospitales en España, lo que representa el 57% del total de centros hospitalarios de nuestro país, con 51.212 camas, que suponen el 32% del total de las existentes y más de once mil centros médicos. Emplea a cerca de 270.000 profesionales de los cuales el 63% trabaja en el ámbito extrahospitalario y el 37% lo hace en el ámbito hospitalario.

A nivel de actividad, los hospitales privados desarrollan una actividad muy destacada, realizan el 30,5% de las intervenciones quirúrgicas, registran el 23,5% de las altas y atienden el 24,5% de las urgencias.

En términos de alta complejidad el sector privado es un importante agente dinamizador y difusor de innovaciones en el entorno de la tecnología, contando con un equipamiento médico avanzado y tecnología de alta complejidad que le permite llevar a cabo una medicina de excelencia. En este sentido, el sector sanitario de titularidad privada dispone del 53% de las resonancias magnéticas, el 49% de los PET y el 36% de los TAC. En cuanto a actividad, en términos de diagnóstico el sector privado lleva a cabo el 39% de las resonancias magnéticas, el 19,4% de los PET y el 16,7% de los TAC.

El aseguramiento privado cuenta con 8,7 millones de asegurados que contribuyen a la descarga y al ahorro del sistema público en un rango que se sitúa entre 4.949 millones de euros a los 11.328 millones de euros, en función de un uso mixto o exclusivo de la sanidad pública y privada, haciendo que la sanidad privada no sólo sea un sistema complementario, sino que en el momento actual tiene un eminente carácter suplementario del sistema sanitario público.

Por su parte la sanidad de titularidad privada juega un papel relevante en las acciones llevadas a cabo para garantizar la sostenibilidad y el acceso al sistema sanitario, cooperando con el sistema público de salud a través de diferentes mecanismos de participación como pueden ser los conciertos, representados fundamentalmente por los destinados al transporte sanitario, la realización de pruebas y procedimientos diagnósticos y terapéuticos; el abordaje de determinadas prestaciones sanitarias como terapias respiratorias, hemodiálisis, logopedia, etc. y los conciertos singulares; el mutualismo administrativo que representa un modelo favorecedor del equilibrio entre el sistema sanitario público y privado una vez que reduce la presión de la demanda de pacientes en el sistema público de salud (da cobertura voluntaria a 1,8 millones de mutualistas) y permite mantener la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud con un gasto per cápita menor; por último, las concesiones administrativas que pueden incluir o no la gestión de los servicios sanitarios.

A nuevos tiempos nuevas fórmulas como la que nos ofrece la tecnología y la innovación, un ejemplo es la interoperabilidad de los sistemas tecnológicos, un elemento clave para garantizar la eficiencia de los servicios sanitarios y la calidad, ya que genera un beneficio para todos los agentes del sector sanitario, primando al paciente una vez que los modelos le otorgan un rol protagonista al reconocer su derecho de acceso a su información clínica. La formación es también una forma de colaboración que gana terreno en la sanidad privada.

En cuanto a percepción del grado de excelencia por el servicio prestado los resultados del Barómetro de la Sanidad Privada en España 2020 y la encuesta desarrollada por Sigma Dos entre usuarios de la sanidad de titularidad pública y privada ponen de manifiesto, una vez más, el excelente estado de salud de la atención ofrecida por la sanidad privada. La amplia cobertura de especialidades, la posibilidad de elección del centro o especialista, la celeridad para realización de pruebas y obtención de resultados, la agilidad terapéutica, la tecnología implantada y el nivel de sus profesionales son algunas de las señas de identidad del sector privado destacadas por los encuestados.

Finalmente, en términos de futuro, nuestro sistema sanitario afronta retos muy relevantes motivados por diversos factores que confluyen en una presión asistencial creciente difícilmente abordable en solitario tal y como lo demuestra la actual pandemia. Es por ello que desde la Fundación IDIS hemos lanzado un Manifiesto “Por una mejor Sanidad” que aboga por una asistencia sanitaria de calidad centrada en los pacientes y los profesionales a quienes se ha de reconocer el esfuerzo y cumplimiento de objetivos y resultados; una sanidad equitativa, eficiente, con financiación suficiente reforzando el fondo de cohesión interterritorial; una sanidad colaborativa y sinérgica, sin apellidos, abierta a establecer reformas y estrategias que fomenten la investigación y la innovación responsable e impulse la digitalización de sus procesos y procedimientos.

En este sentido, es fundamental realizar una transformación digital (como obligación, no como opción) y que se actualice el parque tecnológico y se desarrollen planes asentados en las tecnologías de la información y la comunicación y en la medicina personalizada de precisión. Se hace necesario, por otro lado, un impulso a la transparencia que permita medir y comparar resultados sanitarios y de salud para seguir mejorando.

Quien no apuesta por el futuro no tiene futuro y por ello nuestra obligación es aportar un legado de sostenibilidad también en materia sanitaria, de tal forma que se impulse el liderazgo imprescindible y estratégico en esta materia.