Menos fármacos y precios más bajos en España en 2020
Los nuevos medicamentos aprobados en España en 2020 fueron solo cuatro menos que los de 2019, pero su precio medio fue la mitad que el de los nuevos fármacos de 2019
Sin contar las diferentes presentaciones de cada uno de ellos, el año 2020 la Comisión Interministerial de Precios de Medicamentos (CIMP) dio luz verde a la financiación de 18 nuevos medicamentos. En 2019 habían sido 22. Considerando los precios de las presentaciones más económicas -cuando se trata de varias- el coste medio de los nuevos medicamentos aprobados en España para su financiación en el Sistema Nacional de Salud en 2020 era aproximadamente la mitad de los que recibieron luz verde el año anterior, de acuerdo con las actas de la comisión en ambos periodos, revisadas por elEconomista.
El precio medio de los 20 medicamentos que recibieron una propuesta favorable de precio y financiación por de la CIPM en 2019 fue 5.522 euros. El precio medio de los 15 que la recibieron en el que ya conocemos como “el año de la pandemia” fue 2.870 euros. Para evitar una desviación excesiva del promedio, se han excluido del cómputo las dos terapias más caras -una por año-, que superaban los 300.000 euros en ambos casos.
Hay que matizar que los precios que recogen las actas del CIPM pueden no corresponderse con los que finalmente cuesta cada una de estas terapias en la práctica. Esto se debe a los posibles acuerdos entre las compañías titulares con las diferentes administraciones autonómicas, hospitales o grupos de hospitales, que pueden traducirse en condiciones económicas diferentes.
El segundo medicamento más caro de los aprobados en 2019 costaba 60.000 euros. Es Alofisel, una terapia celular alogénica pionera desarrollada por investigadores españoles del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), la Universidad Autónoma de Madrid y el Instituto de Parasitología y Biomedicina López-Neyra en Granada junto con la empresa española Cellerix, que fundó la exministra Cristina Garmendia. El fármaco se fabrica y suministra a todo el mundo desde la planta de la compañía Takeda en Madrid. Es el primer medicamento con células madre que se aprobó en Europa y está indicado para tratar las fístulas provocadas por la enfermedad de Crohn. Según el Informe de Posicionamiento Terapéutico del fármaco, la patología está asociada a una alta morbilidad y tiene un impacto muy negativo en la calidad de vida.
El Ministerio de Sanidad aprobó financiarlo tras llegar a un acuerdo de riesgo compartido, según el que el fabricante se compromete a cobrar el precio acordado únicamente en aquellos casos en los que se puede demostrar que ha tenido la eficacia mostrada en los ensayos clínicos. En tercer lugar, en la lista de nuevos medicamentos de 2019 en función de su precio figura Orkambi (12.995 euros). Es un tratamiento para la fibrosis quística, una enfermedad hereditaria que provoca infecciones pulmonares graves y serios problemas digestivos.
El segundo medicamento más caro de los que se aprobaron en 2020, Takhzyro, cuesta 14.166 euros. Se trata de una terapia para el tratamiento del angioedema hereditario, una enfermedad poco frecuente, pero grave, que provoca inflamación de curso rápido, particularmente de la cara y las vías respiratorias, así como cólicos abdominales. El tercero por precio es Onpattro (8.529,41 euros), para el tratamiento de una enfermedad rara: la amiloidosis hereditaria por transtiretina, que provoca depósito de un tipo de proteína alterada en los nervios y el corazón.
Desde la perspectiva de las áreas terapéuticas, la oncología es una de los territorios en los cuales la actividad investigadora e innovadora es más intensa en los últimos tiempos, incluyendo innovaciones disruptivas que han mejorado las tasas de supervivencia y la calidad de vida de los pacientes de una forma significativa. El objetivo, que en algunos tipos de cáncer no está tan lejano como pueda parecer, es convertir este espectro de enfermedades en condiciones muy controladas, prácticamente crónicas. La actividad investigadora en materia de cáncer no ha parecido disminuir en el último año, a tenor de los nuevos estudios presentados en los diferentes encuentros científicos que, eso sí, rápidamente se transformaron en reuniones virtuales en 2020. No obstante, las recomendaciones favorables de innovaciones oncológicas en España sí han experimentado un cambio sustancial.
Seis de los nuevos medicamentos aprobados en 2019 eran tratamientos contra el cáncer: de ovario -dos fármacos-, de mama, leucemia mieloide aguda, carcinoma vasocelular y linfoma. En 2020, tres de los fármacos con propuesta favorable de precio y financiación de la CIPM eran terapias para el cáncer, en este caso de próstata -dos- y pulmón.
De acuerdo con el informe anual que publica la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) sobre su actividad, a lo largo de 2020 esta agencia emitió un total de 97 opiniones positivas para 39 nuevos principios activos -excluyendo, por ejemplo, nuevas combinaciones de fármacos ya aprobados-. Ocho de esos nuevos medicamentos se incluyeron en un procedimiento especial que se denomina PRIME, pensado para contribuir a un acceso más ágil a terapias que la propia agencia califica de “prometedoras”, y que sirven para tratar condiciones para las que escasean -o directamente no existen- tratamientos. En total, hay 20 terapias en desarrollo dentro de ese esquema, cinco de ellas son terapias contra el cáncer. De las ocho que ya han recibido una opinión positiva, Blenrep (belantamab mafodotin), Rozlytrek (entrectinib) y Tecartus (brexucabtagene autoleucel) son agentes anticancerígenos. El cáncer es la segunda causa de mortalidad en los países de la Unión Europea, por detrás de las enfermedades cardiovasculares y precediendo a las dolencias respiratorias.
Por otra parte, los nuevos medicamentos para tratar la diabetes, que en 2019 recibieron propuesta favorable de precio y financiación en 2019 fueron tres. En 2020 se aprobó uno.
La hemofilia, un área en la que durante años la innovación ha sido escasa, cuenta con un nuevo medicamento disponible en España desde 2019 y tres en 2020. Los avances en el tratamiento de esta enfermedad fueron ampliamente discutidos en el congreso anual de la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH) anterior al estallido de la pandemia y en su edición posterior en 2020. En 2019 los representantes de la Federación Española de Hemofilia (Fedhemo) se habían reunido con las autoridades sanitarias en un intento por facilitar el acceso a los recientes avances científicos que se han ido produciendo.