Dionisio Martínez, managing director Iberia de Dräger: Claves para impulsar el sector sanitario español
Nunca antes mirar hacia el futuro había sido tan decisivo para determinar el porvenir de las siguientes generaciones. Empresas, organizaciones y autoridades nos hemos visto obligados a modificar nuestra forma de actuar, en este nuevo entorno. La pandemia ha puesto en valor la importancia de disponer de un sistema de salud eficiente, dotado de recursos, integrado, con capacidad de respuesta ante cierto tipo de situaciones. Todo, con un objetivo: salvar el mayor número de vidas posibles.
Estamos inmersos en una crisis social y económica, y al mismo tiempo en el año donde Europa va a dotar de Fondos para que los países miembros desarrollen sus economías, y puedan salir de la pandemia con mayor fuerza. Es tiempo de construir, de impulsar ese desarrollo que nos permita la regeneración del tejido empresarial español. También es tiempo de transferir tecnología y de reforzar nuestro sistema sanitario.
Contar con una estrategia clara y un plan de actuación definido es más necesario que nunca. Tenemos que aunar esfuerzos: autoridades, administraciones públicas y empresas privadas para establecer el sistema sanitario para los próximos años, que es el que podrán disfrutar las futuras generaciones. Hemos aprendido los puntos relevantes, identificado nuestras debilidades, trabajado conjuntamente, y es precisamente ahora cuando lo tenemos que desarrollar.
Nuestro sistema sanitario nacional tiene las competencias delegadas en las autonomías, cada una de ellas con distintas estructuras y diferentes organizaciones. En este punto, no hay que olvidar tampoco que los grupos privados han sido vitales para la gestión de la pandemia. De manera general, los sistemas no están integrados, por lo que no es posible compartir la valiosa y necesaria información que tienen entre ellos; se generan muchos datos y no los usamos de una manera eficiente. Este aspecto resulta fundamental para la gestión hospitalaria y para el tratamiento de los pacientes.
Ahora tenemos la gran oportunidad de superar barreras, de integrar y de desarrollar con las experiencias vividas la tecnología existente. Es el momento en que las empresas españolas inviertan los fondos extraordinarios de una manera inteligente. El sistema sanitario ha sufrido desde la crisis económica del 2008 la falta de recursos, de innovación y de estructuras. Por lo que ahora, esta financiación se presenta como una oportunidad. Muy especialmente en aquellos proyectos donde se requiere una inversión inicial importante y un conocimiento tecnológico avanzado.
Con respecto al equipamiento de tecnología médica, tenemos que analizar las compras realizadas el año pasado, en plena crisis sanitaria, para descubrir qué necesidades están cubiertas actualmente y las que requieren de más inversión. Además, debemos definir la tecnología necesaria para construir un sistema integrado, digitalizado y orientado al paciente. En definitiva, para mejorar así la eficiencia del mismo y la calidad asistencial en todas y cada una de las diferentes áreas.
Las tendencias son conocidas con las nuevas tecnologías, Internet of Medical Things (IoMT). Términos como la hiperconectividad, ciberseguridad, inteligencia artificial y Big Data, debemos tenerlos en cuenta a la hora de planificar el desarrollo necesario, ya que estos términos son la base de la sanidad del mañana que estamos definiendo hoy. Sabemos dónde estamos y dónde queremos ir, y ese es el camino que debemos seguir.
Tenemos muchos interlocutores que pueden y deben sumar en esta fase, principalmente empresas españolas especializadas, PyMES y Start Ups, que son capaces de integrarse en este proyecto, y que pueden aportar un gran valor, por desarrollar su actividad dentro de las tendencias actuales. Son precisamente las empresas las que necesitan del impulso económico, así como de las grandes empresas e interlocutores, para reforzar nuestro sistema sanitario y nuestro tejido empresarial a la par. Como líderes y expertos, es nuestro deber aportar ideas, definir proyectos e integrar estas empresas de una manera natural. La dificultad radica en su identificación, pues muchas de ellas no tienen la suficiente visibilidad, pero resultan imprescindibles en este momento, por todo el valor que pueden aportar.
En Dräger, seguimos trabajando con la misma ilusión del primer día, con la experiencia añadida de más de 130 años de trabajo y dedicación. En el mercado español estamos establecidos desde hace más de 45 años, y seguimos aportando valor y soluciones personalizadas a todos nuestros clientes, con nuestro pleno compromiso de salvar y proteger vidas. Nuestra tecnología para la vida ha sido necesaria e imprescindible en estos tiempos más que nunca, con una involucración extraordinaria de todos nuestros empleados.
Hemos aportado valor a toda la sociedad en general y salvado vidas. Y no hemos dudado ni un segundo en ponernos a disposición de todas las autoridades sanitarias y grupos hospitalarios con el único fin de ayudar. Por eso, estamos convencidos de que cualquier avance que propicie el fortalecimiento de la industria sanitaria española y que aumente la inversión en tecnología para la salud tendrá consecuencias beneficiosas e inmediatas para el país. Invertir en industria sanitaria significa invertir en la vida de las personas, y por eso no debemos dejar pasar la oportunidad que los Fondos Europeos nos brindan en estos momentos.
Ahora, más que nunca, debemos ser capaces de contribuir a priorizar objetivos comunes ante nuestras diferencias. Trabajar todos juntos por un objetivo común. Una buena preparación y planificación, así como el esfuerzo conjunto, serán las claves en esta etapa, que estará caracterizada por la recuperación socioeconómica y el reforzamiento de un sistema sanitario nacional. En definitiva, el futuro del sistema sanitario español está en nuestras manos para ser innovador, orientado al paciente e integrado.