Janssen, Pfizer y Astrazeneca: tres gigantes que buscan la vacuna

Estas tres multinacionales se han colocado en una posición favorable para alcanzar la ansiada vacuna. El plazo que se maneja es principios de 2021

La única manera de volver a una normalidad real es que se encuentre una vacuna para contrarrestar al coronavirus. Hasta entonces, el Covid-19 se puede paliar con tratamientos para evitar muchas muertes, pero no se podrá dar por erradicada a la enfermedad hasta que la mayoría de la población se encuentre bien inmunizada. El trabajo de las farmacéuticas está siendo digno de reconocimiento porque, a pesar de lo que pueda parecer, conseguir tener una vacuna en menos de un año es una proeza.

En este momento hay tres compañías que están mejor colocadas para conseguir una vacuna contra el coronavirus. Janssen, compañía perteneciente a Johnson & Johnson, ha anunciado que ya tiene una molécula candidata a convertirse en vacuna del Covid-19. Los trabajos de investigación y desarrollo comenzaron en enero de 2020, cuando la enfermedad daba sus primeros pasos en China y, tres meses después, los primeros resultados han sido satisfactorios. La compañía ha estado trabajando de la mano de la Autoridad de Investigación y Desarrollo Avanzado Biomédico (Barda) y ya prepara sus instalaciones para poder fabricar las dosis suficientes para abastecer a los países que requieran la vacuna. “La rápida ampliación de la capacidad de fabricación de la compañía tiene el objetivo de proporcionar un suministro global de más de mil millones de dosis de una vacuna”, aseguran desde la farmacéutica.

Janssen iniciará los estudios clínicos en humanos de su posible vacuna en septiembre de 2020 -como fecha más tardía- y anticipa que los primeros lotes de una vacuna Covid-19 podrían estar disponibles para autorización de uso de emergencia a principios de 2021, un plazo sustancialmente acelerado en comparación con el típico proceso de desarrollo de vacunas. Una carrera a contrarreloj que será posible gracias a que la compañía acompasará la producción a los resultados de los ensayos.

Otra de las compañías que también está a la cabeza de esta búsqueda por la cura del coronavirus es Pfizer. La compañía estadounidense se ha unido a la alemana BioNTech y han completado la administración de su candidato vacunal en la primera cohorte del ensayo en humanos. La futurible vacuna comenzó a administrarse el pasado 23 de abril en 12 personas que están participando en el estudio. En la siguiente fase se espera alcanzar una muestra de 200 individuos sanos entre 18 a 55 años, y se utilizarán dosis en un rango de entre 1 μg a 100 μg, con el objetivo de determinar la dosis óptima para estudios posteriores, así como para evaluar la seguridad e inmunogenicidad de la vacuna.

Por último, Astrazeneca ha cogido la batuta de los estudios que estaba llevando a cabo la Universidad de Oxford y también se han puesto un calendario. La potencial vacuna se empezó a estudiar en ensayos clínicos de fase I a finales de abril para valorar la seguridad y la eficacia en voluntarios sanos de entre 18 y 55 años, en cinco centros de ensayo del sur de Inglaterra. Los datos del ensayo de fase I podrían estar disponibles el próximo mes y a mediados de año se podría pasar a los ensayos de fases más avanzadas.

Pascal Soriot, director general ejecutivo de AstraZeneca, ha declarado que el objetivo de la alianza es alcanzar cuanto antes la vacuna. “En este pulso que la COVID-19 está manteniendo con todo el mundo, necesitamos con urgencia una vacuna para vencer al virus. Esta colaboración aúna la gran experiencia de la Universidad de Oxford en vacunología nuestra capacidad de producción y distribución a nivel mundial”, dijo.