El sector privado termina 2021 con más prestaciones que aportaciones

Los instrumentos de previsión social complementaria para la jubilaciones afronta una situación histórica para el sector: cerró 2021 con un mayor volumen de prestaciones que entradas brutas de dinero, lo que deja un saldo neto negativo de dinero en los productos de ahorro financiero

Los planes de pensiones privados han cerrado 2021 con más volumen de prestaciones que entradas brutas de dinero, lo que deja un saldo neto negativo, un hecho que se produce por primera vez en la historia de este producto destinado al ahorro para la jubilación y que muestra claramente las consecuencias de la rebaja al límite de aportaciones máximas a los planes de pensiones individuales, que pasaron de 8.000 a 2.000 euros (a partir de este año bajarán a 1.500 euros).

Los últimos datos de Inverco muestran que el año pasado los planes de pensiones privados captaron 2.539 millones de euros, insuficientes para compensar los flujos de prestaciones por valor de 2.631 millones. En 2020, el año anterior a que entrara en vigor el tajo en los límites, las aportaciones brutas fueron de 4.228 millones, un 41% más de lo captado el año pasado, mientras que las prestaciones se situaron en 2.901 millones, lo que dejó un balance positivo de 1.327 millones en aportaciones netas.

Y lo ocurrido en 2021 muestra el camino de lo que va a ocurrir a partir de ahora: sin la ventaja de la deducción fiscal con un tope más elevado en las aportaciones, los planes de pensiones privados han perdido el atractivo que tenían para muchos ahorradores, que buscan otras formas de optimizar su declaración anual ante Hacienda con otros productos financieros, como los unit linked, seguros de vida que utilizan la carcasa de los fondos de inversión para intentar maximizar el patrimonio invertido, que han visto incrementar su volumen un 30% interanual hasta los 18.906 millones de euros, con casi un 16% más de asegurados, hasta alcanzar 1.396.942 clientes, con datos hasta septiembre de 2021 de Unespa.

Únicamente el buen comportamiento de los mercados bursátiles en 2021 ha logrado dejar una sensación algo más dulce en los planes de pensiones privados, que han conseguido alcanzar un nuevo volumen patrimonial histórico, de 89.323 millones de euros, al sumar algo más de 7.300 millones por la revalorización de los activos. Esta caída del volumen de captaciones brutas de dinero se ha hecho más evidente en diciembre, un mes en el que tradicionalmente los ahorradores aprovechan para analizar el saldo de sus inversiones en el año para intentar conseguir alguna ventaja en la elaboración de su declaración fiscal, por lo que solían dedicar una parte importante de sus ahorros a los planes de pensiones. Pero sin el incentivo de la deducción, el volumen de captaciones brutas ha caído un 62%, según los datos de Inverco.

Y esto significa que para atender las prestaciones de los partícipes y sus beneficiarios, los planes individuales solo contarán a partir de ahora con la evolución de los mercados para incrementar su patrimonio, una situación que se complica para los ahorradores más conservadores. Hay que tener en cuenta que los planes individuales de renta fija acumulan 12.400 millones de euros, a los que habría que añadir otros 34.350 millones de los planes mixto.

Sin noticias

La idea del ministro de Seguridad Social, José Luis Escrivá, al rebajar los topes en las aportaciones a los planes de pensiones individuales era incentivar el desarrollo de los planes de empresa, aumentando los límites de aportaciones en éstos hasta los 8.000 euros (8.500 euros a partir de este año). Pero más allá del borrador del anteproyecto de ley que regulará la creación y fomento de dichos productos, no se sabe nada más sobre las ventajas fiscales que podrán aplicarse las compañías que los promocionen, lo que será el verdadero caballo de batalla, a juicio de las gestoras, para saber si realmente se quiere desarrollar el segundo pilar en España.