El ‘edadismo’ laboral duplica el desempleo sénior hasta el 13%

El mercado de trabajo de los mayores de 55 años avanza progresivamente hacia el autoempleo y el emprendimiento como solución forzada debido a la falta de oportunidades. El desempleo, antes de la crisis se situaba en el 6% y ahora es más del doble, según reclama el ‘think tank’ Ageingnomics

El edadismo laboral, entendido como la discriminación que sufren los trabajadores mayores de 55 años, es uno de los principales factores que ha provocado que el paro en la cohorte sénior se duplique, pasando del 5,82 previo a la crisis financiera de 2008, hasta el 12,75% que registró el INE en el segundo trimestre de 2021. Es uno de los principales reclamos que desprende el Mapa de Talento Sénior, el último estudio del mercado laboral sénior y la economía plateada presentado por el Centro de Investigación Ageingnomics, de Fundación Mapfre.

Este concepto, el edadismo, concluye que los mayores de 55 años son uno de los grupos vulnerables del mercado laboral, junto a los jóvenes, las mujeres y los inmigrantes. La duración del desempleo de este colectivo o el aumento del trabajo autónomo y el emprendimiento como única vía para seguir activo son las dificultades que se han agravado en las perspectivas de trabajo de los sénior desde el boom financiero de 2008. Según señala el centro de investigación presidido por Juan Fernández Palacios, “en España corremos el peligro de que se instale la idea de que superar los 50 años es no tener futuro laboral”.

El informe destaca que la población sénior en España aporta de un modo relevante al mercado laboral y la economía. De los 3,6 millones de españoles sénior que trabajan actualmente (19%), un total de 2,8 millones (8 de cada 10), lo hace por cuenta ajena, la mayoría en el sector privado y con contrato a tiempo completo (90%).

Precisamente, tal y como recoge el think tank de Fundación Mapfre, el mercado laboral ha relevado a los mayores de 55 años al trabajo por cuenta propia. Así, conforme avanzan los tramos de edad, mayor es el porcentaje de autónomos. Entre 55 y 59 años, hay 447.514 afiliados por cuenta propia en una balanza de 21,7 contra 78,3 a favor de los afiliados por cuenta ajena, que son más de 1,6 millones de trabajadores. Sucesivamente, se reduce el número total de trabajadores y aumenta el porcentaje de autónomos hasta el 72,7% (ver gráfico) hasta alcanzar un total de 900.000. Igualmente, la tendencia en la variación de afiliación por cuenta ajena de los sénior es positiva, frente a los jóvenes, entre 16 y 45, que registran tasas negativas.

La presentación del estudio sobre la economía longeva contó con la clausura del ministro de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá. El protagonista de la reforma de pensiones defendió la necesidad de reforzar los incentivos para fomentar la jubilación demorada como una de las medidas para garantizar la sostenibilidad del sistema de pensiones y aumentar la tasa de actividad sénior, en la que se encuentran las personas mayores de 55 años.

El papel de Ageingnomics radica en potenciar el valor de la economía silver y la función productiva de los mayores de 55 en la economía de nuestro país, además del reconocido peso en el consumo.

Entre 2008 y 2020, el número de personas mayores de 55 años ha crecido en 2,9 millones, de los que 1,6 son población activa, un dato que se debe principalmente al retroceso de la fecundidad y la acentuación del envejecimiento, y que pone de manifiesto que cada vez son más los sénior que emprenden y trabajan en España.

Ante la falta de oportunidades, los mayores de 55 buscan soluciones en base al emprendimiento y trabajo por cuenta propia. Unos 300.000 españoles sénior son directivos emprendedores, una cifra que tras la crisis de 2008 se ha incrementado y que está caracterizada por un colectivo que pone en marcha sus ideas de negocio más eficazmente que los jóvenes. También se trata de un grupo que aporta ventajas a la hora de emprender, entre ellas, tener redes más desarrolladas, posiciones financieras más fuertes, capacidad de movilizar recursos, dotar de legitimidad a sus proyectos y haber adquirido capital social durante su carrera profesional.