Giorgio Semenzato, CEO y cofundador de Finizens: “La reforma reaviva el debate de cómo financiar las pensiones ante un sistema público quebrado”

En un momento en el que los planes de pensiones pierden potencial por el recorte de incentivos fiscales a las paorttaciones del sistema individual, los inversores buscan alternativas para refugiar sus ahorros con opciones como los planes indexados, que registran costes de gestión notablemente inferiores a la media del mercado.

En pleno despliegue del primer paquete de medidas de la reforma del sistema público el CEO y cofundador de Finizens, Giorgio Semenzato, analiza con elEconomista Pensiones el impacto para los ahorradores.

¿Cómo ha impactado en los planes de pensiones indexados las medidas del gobierno sobre fiscalidad del ahorro?

La reducción del límite de aportaciones exento de IRPF ha impactado sobre todos los planes de pensiones individuales en España, independientemente de que estos fueran indexados o no. En los últimos dos años el incentivo fiscal ha sufrido un recorte del 81%.

En términos de impacto, por un lado, están los inversores que hacen una planificación fiscal de su ahorro anualmente y de manera constante. Este patrimonio, al haber sido previamente aportado de parte de los ahorradores en ejercicios anteriores, no se ve afectado por el ultimo recorte de incentivos fiscales. También corroboramos que nuestros inversores siguen desgravándose el máximo permitido actualmente por ley. Es decir, que pese al recorte, se mantienen firmes en cuanto a planificar de forma seria y responsable su ahorro de largo plazo. Nuestros inversores están complementando la aportación máxima permitida por ley de 2.000 euros invirtiendo el dinero que excede dicha cantidad en nuestras carteras de fondos de inversión indexados. Con esta estrategia son capaces de obtener la máxima desgravación fiscal a la vez que rentabilizan y consolidan la totalidad de su patrimonio, frente a un sistema público de pensiones que se ha hecho insostenible y no fiable.

También hay mucha gente que aún no ha empezado a planificar la inversión para su jubilación; seguimos experimentando un elevado interés en nuestro plan de pensiones indexado por parte de este segmento de la población ya que es una solución muy accesible y efectiva, con un riesgo más controlado y unas rentabilidades históricas más altas que la media.

¿Ha habido caída de aportaciones?

Gracias a los atributos diferenciadores de nuestros planes de pensiones indexados seguimos atrayendo aportaciones tanto de ahorradores novatos como de inversores experimentados, lo que nos ha permitido más que doblar nuestro patrimonio en este producto a lo largo de los últimos 12 meses.

Y sobre la rentabilidad, ¿cómo se está comportando este año la gestión pasiva?

Recientemente, a finales de noviembre 2021, nuestros planes de pensiones han cumplido cinco años desde su lanzamiento. En este periodo, nuestros planes de pensiones indexados han generado una rentabilidad media acumulada del 24,6% desde su lanzamiento, llegando hasta el 43% para nuestro perfil más atrevido. Tomando como referencia la rentabilidad producida por la media de los planes de pensiones comparables en España (fuente: Inverco para la categoría de planes mixtos), la rentabilidad media de los planes de pensiones de Finizens desde su lanzamiento se ha situado en media un 7% por encima del sector. De hecho, nuestros cinco planes de pensiones han registrado rentabilidades positivas consistentemente en todos los periodos temporales de uno, tres y cinco años, y en este año 2021 (a fecha de 7/12/2021) acumulan una rentabilidad media del 8,6%, alcanzando hasta un 15,4% para nuestro perfil más atrevido.

¿Con qué nivel de costes de depósito y gestión han operado este año?

Decidimos aplicar una comisión de gestión de tan solo el 0,4% anual a nuestros planes de pensiones indexados, siendo de las más bajas del mercado y considerablemente inferior a la media de los productos bancarios. La comisión por depositaría es igualmente de las más baratas del mercado, ascendiendo tan solo al 0,05% anual.

¿Temen la competencia que puede tener el sector con el fondo público de pensiones?

Honestamente, la única lectura positiva que sacamos de la reforma de las pensiones es que reaviva el debate acerca de cómo abordar, el reto estructural de financiar las pensiones de los ciudadanos ante un sistema de pensión publica quebrado, abriendo la puerta a nuevas formas de colaboración público-privada para tratar de dar solución a un problema tan grave como la sostenibilidad de las pensiones a través de una correcta planificación de la inversión. Dicho esto, pensamos que esta clase de iniciativas deberían articularse de una manera suficientemente abarcadora para permitir que participen y colaboren de forma eficiente y competitiva todos los agentes de la industria, algo sobre lo que tenemos dudas a la luz de las últimas informaciones que han trascendido sobre este vehículo. Adicionalmente, de momento los anteproyectos que se han formulado no incorporan incentivos fiscales para las empresas, pero a la vez sí se han añadido nuevos impuestos que gravan tanto a las empresas como a los trabajadores, como el factor de equidad generacional. La probabilidad de éxito y efectividad de estas reformas va a ser muy bajo, o incluso puede llegar a implicar un retroceso para el ciudadano.

¿Les parece un instrumento que puede ser atractivo para ahorradores?

Debemos tener en cuenta que, hasta la fecha presente, los planes de empleo suponen tan solo un 29% del sistema de pensiones de España, excluyendo a las pensiones públicas. En cambio, en el tercer pilar contamos con planes de pensiones individuales con amplios track record que ofrecen más flexibilidad y cobertura para todos los perfiles de ahorrador, además de proporcionar adaptación al ciclo de vida de una persona, y con ya más de siete millones de partícipes en toda España. Si a esto añadimos el incentivo fiscal existente hasta ahora, creemos que el inversor ya disponía de opciones muy válidas y más convincentes para ahorrar de cara a su jubilación, frente a los obstáculos operativos que presenta el desarrollo e implantación masiva del sistema de planes de empleo. La reforma se encamina a un experimento cuyos antecedentes en España son de un éxito más bien escaso, ya que son muy pocas las empresas que ofrecen actualmente planes de empleo a sus trabajadores y generalmente son empresas de gran tamaño que pueden hacer economías de escala, mientras que en España la mayoría de las empresas son pymes y con recursos demasiado limitados para afrontar con éxito un proyecto de esta envergadura.

Entonces, ¿se logrará expandir el ahorro?

Tenemos nuestras dudas. No debemos olvidar que la mayoría del tejido económico privado en España se compone de pymes. Teniendo en cuenta el bajo nivel de educación financiera que existe de media en España comparado con otros países comparables, los altos niveles de burocracia y la falta de incentivos fiscales atractivos, pensamos que la viabilidad para la mayoría de las empresas de cara a adoptar los nuevos planes de empresa y así expandir su uso entre los trabajadores estará muy determinada por los costes que conlleven y por el grado de facilidad operativa con el que puedan implementarlos.

¿Qué comportamiento se espera del tercer pilar de ahorro individual a futuro?

No es entendible por qué se ha decidido castigar al ahorro individual de forma tan dura y repentina sin ofrecer previamente una alternativa que ya esté desarrollada, testada y consolidada. De momento, lo que vemos que ha ocurrido es una penalización a aquel ahorrador que ha sido previsor y que se ha preocupado por crear su propio colchón de seguridad para la jubilación a cambio de una promesa futura muy frágil. Dicho esto, se ha hecho patente como el sistema público de pensiones es insostenible y visto la elevada incertidumbre en torno a los nuevos planes de empleo de promoción pública, nuestra recomendación a los españoles es que, para ser prudentes, sigan ahorrando para su futuro todo lo posible y haciéndolo por su cuenta, por ejemplo mediante planes de pensiones individuales indexados.