La deuda del Sistema roza los 100.000 millones de euros

La necesidad de financiación del Sistema extraordinaria para este año triplicará la del pasado ejercicio. Dispondrá de hasta cuatro inyecciones de capital, además de los ingresos por cotizaciones sociales procedentes de rentas laborales.

La Seguridad Social afronta un reto sin precedentes en la actual crisis sanitaria, como principal organismo encargado de financiar la mayoría de las ayudas que el Gobierno lleva aprobando durante las últimas semanas con objeto de proteger a empresarios y trabajadores que se han visto obligados a frenar su actividad, y no lo hará en las mejores condiciones presupuestarias. Tras el préstamo aprobado por el Consejo de Ministros de 13.830 millones de euros y los dos concedidos este mismo martes por valor de 30.500 millones de euros, el organismo encargado de pagar las pensiones en nuestro país con el Estado es de 99.000 millones de euros, es decir, 8,25 puntos porcentuales del PIB.

De este modo, con la aprobación de las dos últimas inyecciones, el Estado sale al rescate del organismo encargado de pagar las pensiones en nuestro país tras la aprobación en el Consejo de Ministros de este martes de dos préstamos, uno de 14.002 millones de euros –la transferencia anual destinada a pagar las prestaciones no contributivas de la Seguridad Social– y otro de hasta 16.000 millones para afrontar los gastos extra generados por las ayudas para combatir la pandemia. Y a los que se suma el liberado en el pasado mes de abril por valor de 13.830 millones de euros que, a diferencia de estos dos últimos, sí que aparece recogido en los Presupuesto Generales y por lo tanto no repercute en un incremento de la deuda.

De este modo, la Seguridad Social dispondrá de hasta tres créditos en 2020 para afrontar los compromisos de pago de pensiones y de las ayudas por el Covid-19 para empresas y trabajadores por valor de 45.000 millones de euros.

Tal y como avanzó este medio, el devengo de la Seguridad Social con la Administración central ya alcanzó los 68.850 millones de euros tras el consumo de la primera línea de crédito, ahora las previsiones sobre este saldo se desbordan con la noticia anunciada por el Consejo de Ministros: la deuda del Sistema se situará en los 99.000 millones de euros, un 8,25% del PIB. A esta cifra, también se agregan los créditos concedidos desde el año 1992: hasta el 2020, la Seguridad Social había dispuesto de cuatro créditos, mientras que solo este año se han concedido tres. De hecho, los 45.000 millones liberados este año triplican la necesidad de financiación extra experimentada el pasado ejercicio, cuando solo se dispuso de un préstamo.

De hecho, hace un mes, elEconomista avanzó que la Seguridad Social precisaría de un segundo préstamo en este ejercicio para poder abordar las ayudas por el Covid-19 y el pago de las pensiones, especialmente de las pagas extraordinarias de junio y noviembre. Entonces, se especulaba con una cuantía que ha terminado por ser el doble de lo previsto a tenor de las necesidades principalmente asociadas al pago de los Erte. Hay que recordar que solo en los meses de junio y noviembre, la Seguridad Social abona conjuntamente la nómina ordinaria y extraordinaria de las pensiones, un desembolso de en torno a 20.000 millones de euros y que puede generar tensiones de liquidez al Sistema.