Vidrala centrará el crecimiento futuro de su actividad en el mercado sudamericano

El fabricante alavés de vidrio entró en febrero en Brasil con la compra del 30% de Vidroporto, un mercado que supondrá “el futuro de la compañía”, según su presidente, Carlos Delclaux.

Vidrala inició el año 2023 con un cambio de paso, tras un ejercicio anterior lastrado por el incremento de los costes energéticos y logísticos, principalmente. El grupo alcanzó una facturación de 377,9 millones en el primer trimestre, un 35,5% más que en el mismo periodo del año anterior, y elevó su beneficio neto a 58,6 millones, frente a los 800.000 euros del mismo periodo del año anterior. El beneficio bruto de explotación (ebitda) aumentó un 332,6% en el primer cuarto del año, superando los 100 millones, mientras en las mismas fechas de 2022 la cifra era de 23,3 millones.

Así, la compañía alcanzó un margen sobre ventas del 26,6% en los tres primeros meses de 2023, frente al 8,3% que registró el año anterior. “Estamos en el entorno del 25%, algo más normal, pero todavía por debajo de épocas anteriores”, señaló Carlos Delclaux en un encuentro previo a la Junta de Accionistas de Vidrala.

El directivo espera que la recuperación de los márgenes de negocio se consolide a lo largo del año, reforzada por las nuevas inversiones que está acometiendo la compañía, (750 millones de euros en los próximos cinco años), así como gracias a la adquisición de la infraestructura logística ‘The Park’, en Bristol (Reino Unido) y la compra de una participación minoritaria del 29,36% en la sociedad brasileña Vidroporto, con opción sobre el 100%.

Signos de debilidad de la demanda

Precisamente, con una demanda de vidrio que empieza a dar “signos de debilidad” debido al entorno económico, Vidrala ve en el mercado sudamericano su crecimiento futuro.

“El crecimiento del negocio en Europa es estático y la compra de Vidroporto supone la apertura a un mercado de crecimiento y en auge”, aseguró Delclaux. “Grandes compañías cerveceras como Heineken, Estrella Galicia o Carlsberg tienen proyectos de negocio e inversión allí”.

De esta manera, la opción de compra que tiene Vidrala sobre el 70% restante de Vidroporto supondrá una oportunidad de futuro para el fabricante alavés. “No hay prisas por completar la adquisición”, afirmó el presidente de Vidrala, aunque previsiblemente se finalizará a lo largo del presente 2023.

El endeudamiento neto de Vidrala se ha elevado hasta suponer 0,9 veces el ebitda, un 50% más que el año anterior. Así, la deuda de la compañía ha escalado hasta los 316 millones, con 88,4 millones correspondientes a operaciones de fusiones y adquisiciones. No obstante, “el objetivo es acabar 2023 con una generación de caja de 150 millones y reducir así la deuda”, según el presidente de Vidrala.