Una apuesta por la innovación que fructifica

La apuesta por la innovación es continua en Euskadi tanto en el ámbito empresarial como en el institucional y su ecosistema cuenta para su impulso con Innobasque, agencia vasca de la innovación que les acompaña, ayuda y guía en ese viaje sin final. Además, innovar es más importante ahora si cabe para encarar con éxito las transiciones que afectan a la sociedad global.

Fruto de ese trabajo y ese reto innovador, la comunidad autónoma vasca ha vuelto a posicionarse entre las regiones europeas de alta innovación. En concreto, en el indicador Regional Innovation Scoreboard 2023 (RIS 2023), que mide el desempeño de los sistemas de innovación, Euskadi ha logrado escalar 21 posiciones desde la última publicación del citado indicador, hasta situarse en la posición 72 sobre un total de 239 regiones.

El País Vasco es la comunidad del Estado mejor posicionada y su rendimiento en innovación es superior a la media de la UE-27 (109,8%). Por ello, la Comisión Europea ha vuelto a señalar a Euskadi como polo de excelencia, por ser una región de alta innovación en un Estado calificado como de innovación moderada.

Este es el caso de unas pocas regiones, por ejemplo, la región de Praga en Chequia; la provincia autónoma de Trento, Friul-Venecia Julia o Emilia-Romaña en Italia; o la región de Budapest en Hungría.

Las principales fortalezas del País Vasco son, según este informe europeo, la alta cualificación de su población joven, los elevados impactos de la innovación en términos de ventas de nuevos productos, y el elevado porcentaje de personas en procesos de aprendizaje a lo largo de la vida.

No obstante, Euskadi mantiene el reto de elevar el porcentaje de pymes innovadoras y de incrementar la inversión en actividades para la innovación como el diseño, el marketing, la gestión de la propiedad intelectual e industrial o la formación.

Con todo esto y aunque los datos son buenos, no se puede perder el ritmo de la innovación o, como se suele decir coloquialmente, “dormirse en los laureles”. Otras regiones avanzan también a gran velocidad para conquistar las primeras posiciones. Felicitarse sí, pero sin caer en el regocijo recurrente.