Haizea Wind impulsa al proveedor local con su cartera de 1.500 millones

Tras cinco años de actividad en el puerto de Bilbao, el fabricante de torres eólicas se consolida en el mercado internacional con una cartera superior a 1.500 millones, gracias a contratos con Iberdrola y Ørsted, entre otros. Estos pedidos impulsan, a su vez, al sector industrial vasco de energías renovables.

El ecosistema vasco del sector de las energías renovables cuenta ya con otra compañía que tracciona e impulsa la actividad de la cadena local de proveedores: Haizea Wind.

Desde que iniciara su periplo empresarial en el puerto de Bilbao hace cinco años, el grupo fabricante de torres eólicas y diferentes estructuras ha experimentado un crecimiento meteórico en el mercado internacional y ha fortalecido, a su vez, al tejido industrial de Euskadi.

El momento dulce de Haizea Wind es de tal dimensión que afronta la ampliación de sus instalaciones en la dársena bilbaína, obligada por la consecución de importantes contratos con compañías como la danesa Ørsted, que le reportará ingresos por 700 millones, y el más reciente con Iberdrola, grupo tractor de la economía vasca. En concreto, el fabricante de torres eólicas y otras estructuras ha firmado con Scottish Power, perteneciente a la eléctrica vasca, un acuerdo de más de 200 millones para el suministro de 50 monopilotes desde sus instalaciones del puerto de Bilbao.

En el 80% de los parques eólicos marinos

Los monopilotes son grandes estructuras de acero, que sirven para fijar los aerogeneradores al lecho marino, cimentación que está presente en el 80% de los parques eólicos marinos en operación.

Los 50 monopilotes que Haizea Wind fabricará para Iberdrola servirán para soportar los aerogeneradores del parque eólico marino East Anglia Three en el Reino Unido. En total, dicho parque tendrá una capacidad de 1,4 GW y suministrará energía limpia a más de un millón de hogares británicos.

Este contrato con Iberdrola generará, además, 350 empleos directos y sumado al cerrado anteriormente con la firma danesa Ørsted lleva al grupo a ampliar sus instalaciones de 48.000 metros cuadrados a 200.000, para atender una cartera de pedidos que ya supera los 1.500 millones para los próximos cuatro años. La inversión prevista en esta nueva infraestructura es de 150 millones. A las tres naves actuales, Haizea Wind Bilbao sumará otras tres, y un área de almacenamiento adicional para acomodar los monopilotes antes de que su entrega a los buques de transporte.

El lehendakari del Gobierno Vasco, Iñigo Urkullu, el presidente de Haizea Wind Group, Dámaso Quintana, el presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán y el diputado General de Bizkaia, Unai Rementeria, junto a otros representantes institucionales, asistieron a la colocación de la primera piedra de las futuras instalaciones.

Urkullu destacó que la unión de dos empresas vascas “nos hace más fuertes y más competitivos en el mercado global”. Por su parte, Ignacio Sánchez Galán ahondó en la aportación de su compañía a la economía vasca. Durante el pasado año, realizó compras y contrataciones de servicios a 600 proveedores vascos por un valor de 1.700 millones.

Ahora con su actividad, Haizea Wind es también un proyecto tractor de la economía vasca. “Mas allá de la producción y equipos que fabricamos, ayudamos a fijar en nuestra región a otras empresas, que nos suministran elementos o servicios, como firmas de logística, de mantenimiento, industria auxiliar, máquina-herramienta, elementos de izado, tornillería, equipamiento eléctrico, formación profesional, supervisión de calidad, etc.,” enumera Borja Zárraga, CEO de Haizea Wind Group.

La mitad de sus proveedores

“En muchas ocasiones nuestros clientes condicionan qué empresas están homologadas o tienen acuerdos marco a los que nos debemos acoger. En todo caso, el tejido industrial vasco nos permite cubrir gran parte de nuestras necesidades y de entre todos nuestros proveedores en el Estado, cerca de la mitad son de Euskadi”, explica Zárraga.

El componente que más compra Haizea Wind al proveedor vasco son las bridas, a Forjas de Iraeta y Euskal Forging, principalmente. Los suministros de otros fabricantes se montan en los equipos fabricados por Haizea, como es el caso de actuadores hidráulicos, cojinetes, sistemas de frenado, tornillería, equipamiento eléctrico, cables, plataformas, etc. “De manera que empresas como Lau Lagun, Hine, Glual, Erreka, Arteche, Ingeteam, etc., se ven beneficiadas por nuestra actividad. Y contamos maquinaria producida en el País Vasco, como puentes grúa de Jaso o GH y centros de mecanizado de compañías como Soraluze, Zayer y Gurutzpe”, detalla el directivo.

El consumo de bienes y servicios de proveedores locales garantiza a Haizea Wind una gran flexibilidad en su actividad, “especialmente cuando nos enfrentamos a imprevistos como reparaciones o incrementos en el volumen del pedido”. Pero, además, implica el fortalecimiento de la economía local, creación de empleos, la especialización del territorio en torno a la industria eólica, etc. También minimiza la huella de carbono de su actividad. ”Somos una parte importante de la cadena de suministro en la energía eólica, y el objetivo es que nuestra producción sea lo más sostenible posible, comenzando por el uso de energía renovable y exigiendo lo mismo al proveedor para minimizar la huella de carbono de la cadena de suministro”, comenta Borja Zárraga.

Haizea Wind Group se conformó en 2017, apoyándose en dos empresas existentes (Grupo WEC y Tecnoaranda). En 2018 puso en marcha Haizea Sica, su fábrica de torres eólicas en Santa Fe (Argentina). En el mismo año se lanzó la producción en la fábrica de torres marinas en el Puerto de Bilbao. En 2022, inauguró la planta de Haizea Breizh en Francia, dedicada también a las torres eólicas marinas. Haizea Wind Group cuenta con tres unidades de negocio: las torres eólicas, las cimentaciones offshore y grandes piezas de fundición para eólica.

El grupo da empleo a 1.300 personas, 500 en Bilbao, y cerró 2002 con un negocio de 300 millones, cifra que duplicará en tres años. La plantilla superará las 1.800 personas en 2025.