El momento de pasar a la acción

Son tiempos de grandes y veloces cambios, de transformaciones de diversa índole que indican que ya nada volverá a ser igual a lo anteriormente conocido. Estas y similares afirmaciones retumban sin cesar en nuestros pabellones auditivos desde hace ya unos años y nos recuerdan que hay que hacer cosas, cosas diferentes, y que hay que hacerlas rápido porque, de lo contrario, perderemos el tren de la prosperidad.

Y como nada volverá a ser lo mismo, no sirve regocijarse en los logros pasados o en las pérdidas sufridas. Importa el presente y el futuro y lo que se haga para que sea lo más próspero posible.

Es necesario, por tanto, pasar a la acción. Es el momento de actuar y tomar medidas, pero desde la escucha activa y desde la colaboración entre todos los agentes sociales y económicos para diseñar en común el mejor futuro.

La economía vasca está sana, es dinámica y tiene un tejido industrial envidiable y con sectores tecnológicos punteros y de reconocimiento internacional. Destacar en este punto que IBM se ha puesto la txapela y ubicará en San Sebastián su sexto ordenador cuántico mundial y que el Massachusetts Institute of Technology también ha elegido la capital guipuzcoana para investigar junto a Mubil sobre movilidad inteligente y sostenible.

Además, el ecosistema de I+D e innovación vasco es reconocido en Europa como de alta innovación y las inversiones en este ámbito seguirán creciendo: Un 7,2%, hasta 1.895 millones, según el informe Estimación de la inversión de Euskadi en I+D para 2023, realizado por la Agencia Vasca de Innovación-Innobasque.

A lo anterior se une que las perspectivas son optimistas para el segundo semestre, según el Observatorio de coyuntura industrial, en la mayoría de los 16 clústeres vascos en pedidos, facturación, exportación, empleo e I+D+i.

Euskadi tiene todo lo necesario para pasar a la acción y diseñar un territorio amable y atractivo a nivel internacional.

Las bases y pilares son favorables para construir un futuro próspero, pero hay que avanzar rápido para no quedarse atrás y pasar, sin dilación, a la acción.