África, la gran oportunidad

Hace más de 20 años que digo y escribo que “África es la mayor responsabilidad de Europa y también la mayor oportunidad”. Es responsabilidad porque muchos de los países europeos tienen una gran culpa histórica de los males que hoy aquejan a muchos países africanos y es oportunidad porque en África está casi todo por hacer y, como iremos viendo en los sucesivos artículos, la mayoría de las debilidades de la Europa actual son fortalezas presentes y futuras en África. Y si estas fortalezas las desarrolla Europa beneficiando a ambos continentes, es decir generando riqueza y empleo en ambos, todo el proceso fortalecerá a los dos continentes logrando que Europa vuelva a estar entre los líderes del mundo y África vuelva a contar en el mundo, dejando de ser amenaza y convirtiéndose en la gran oportunidad que solucione muchos de los retos a los que nos enfrentamos, como: energía, alimentación, salud, empleo, etc.

Dentro de la brevedad de cada artículo trataré de explicar cada oportunidad y como afrontarla y por qué los empresarios marroquíes y españoles podemos y debemos liderar este proceso de inversión y crecimiento rentable y sostenible en África, porque no se trata de ayudar a África, sino de utilizar las enormes oportunidades de África para beneficiar a la mayor cantidad posible de personas, en África y en otros continentes. Y no me voy a limitar a escribir, sino que voy a dedicar el resto de mi vida a demostrar con hechos que esto es posible y muy positivo para todos y que las barreras que hoy muchos ven se pueden solucionar con gestión acompañada de respeto, amor y pasión.

No es la primera vez que me enfrento a un reto similar, porque en 1.990 cuando, siendo yo presidente de Tavex, invertimos 60 millones de dólares en Marruecos, recibí muchas críticas, pero conseguimos poner la fábrica en marcha en solo nueve meses, formar a personas marroquíes con tanta eficiencia como nuestros mejores especialistas en Euskadi y Valencia, generar beneficios y, por lo tanto, empleos sostenibles desde el primer año y crear en Marruecos una infraestructura textil de confección sostenible que en Europa no lo era.

En este proceso ya me acompañan empresas que creen en lo que aquí he escrito y pronto ofreceremos resultados que demuestren que tenemos razón.