Atraer, retener, desarrollar... Todo vale para conseguir talento

La falta de profesionales cualificados para cubrir determinados puestos de trabajo es hoy una realidad que se irá recrudeciendo con el paso de los años, debido a las cada vez más bajas tasas de natalidad. Pero lo cierto es que las sociedades que cuentan con más avances tecnológicos presentan menores tasas de desempleo, lo que pone de manifiesto que es necesario promover la innovación.

Precisamente, en la reciente celebración del Global Innovation Day, cita anual de la innovación vasca, el talento y su búsqueda tuvo un papel protagonista: ‘El talento motor de la innovación’. Y hubo buenas muestras del talento innovador en el ámbito industrial, tecnológico, científico, cultural y en la Educación STEAM (ciencia, tecnología, ingeniería, arte y matemáticas).

Pero es necesario mucho más. El lehendakari, Iñigo Urkullu, manifestó en la clausura del encuentro su “firme convicción” de que el futuro de Euskadi pasa por la innovación y por ello, abogó por reforzar todos los factores que faciliten el desarrollo, atracción y retención de talento, como activo crítico para el progreso de la investigación y la innovación.

Así, el Gobierno vasco, junto con Deusto Business Alumni, ha realizado un encuentro en Londres para mostrar las capacidades de Euskadi y atraer talento. Esta iniciativa estaba dirigida a personas de origen vasco que hoy día trabajan en la capital británica, y a personas de otros países que, aunque residen en Londres, han mostrado un interés por el ecosistema profesional de Euskadi. Allí se mostró, a través de testimonios de extranjeros que trabajan en Euskadi, las variables más valoradas como la proyección internacional de sus empresas, la facilidad para integrarse en la vida social y laboral, y la calidad de vida y de infraestructuras y servicios sociales.

Euskadi se enfrenta a un declive demográfico y las previsiones apuntan a que faltarán más de 200.000 personas para cubrir el relevo generacional en las próximas décadas. Esto acarreará importantes consecuencias laborales, económicas y fiscales, por el creciente refuerzo fiscal para mantener el estado de bienestar actual.

Ante esta situación es imprescindible tomar medidas para atraer y desarrollar talento que mantenga el crecimiento y competitividad de la economía vasca.