ITP Aero retorna a ‘números negros’ en el ejercicio de su venta

ITP Aero cerró 2021 con un beneficio neto de 67 millones de euros y unos ingresos de 915 millones, tras las pérdidas de 13 millones y negocio de 735 millones, un 25% menos que en 2019, del ejercicio precedente. El fabricante aeronáutico retornó así a beneficios tras un nefasto 2020 debido a la pandemia, en el año que cambió de propietario: Rolls-Royce vendió el grupo vasco (la operación se cerrará el 30 de junio) al consorcio formado por Bain Capital, JB Capital (fondo de Javier Botín) y la guipuzcoana Sapa, en septiembre.

Los resultados responden a un entorno macro más favorable e incluyen tanto el negocio de ITP Aero como el negocio recurrente generado por la planta de Hucknall (Reino Unido), adquirida en 2021. El fabricante destaca también el negocio de defensa, con una tendencia positiva.

ITP Aero concluyó el año con 4.175 trabajadores. El grupo firmó en 2021 contratos con Pratt & Whitney Canadá y continuó desarrollando el programa FCAS, futuro sistema aéreo de combate, como líder del pilar tecnológico de motor en España. El grupo, además, avanzó hacia una aviación más sostenible al ser miembro fundador de la iniciativa Clean Aviation de la UE. Un hito tecnológico fue el motor demostrador UltraFan de Rolls-Royce.