La empresa exige menos burocracia con los fondos Next Generation

Las empresas vascas reclaman al Gobierno central que acelere la implementación de los Fondos Next Generation y agilice su tramitación, que se está viendo afectada por la excesiva burocracia, en la celebración de la jornada ‘Next Generation País Vasco’, organizada por ‘elEconomista.es’.

Las empresas vascas coinciden en advertir que el dinero de los Fondos ‘Next Generation’, con una dotación para España entre ayudas directas y préstamos próxima a los 140.000 millones de euros, no está llegando después de dos años y alertan de que con el horizonte temporal establecido por la Unión Europea existe el riesgo de que una parte de dichos fondos tenga que ser devuelta. Mientras, desde los clústeres de automoción, de industrias de conocimiento y tecnología, Gobierno vasco, Fundación Mubil y Kutxabank destacan la importancia de no esperar a que las convocatorias de las ayudas europeas se hagan efectivas, ya que están experimentando un notable retraso, y comenzar a desarrollar proyectos para que las empresas estén preparadas ante los cortos plazos de solicitud, especialmente en el caso de las pymes.

Estas son algunas de las conclusiones expuestas por los participantes en la jornada ‘Next Generation País Vasco’, que organizó elEconomista.es el pasado 25 de mayo en Bilbao y que inauguró el lehendakari del Gobierno vasco, Iñigo Urkullu.

Urkullu exigió mayor gobernanza y agilidad en el reparto y la gestión de los fondos europeos. Destacó que estos recursos deben “asentar las bases para las próximas generaciones”, máxime en un momento de recuperación tras la pandemia y con el impacto de la guerra aún latente.

Ante este reto, explicó que “el momento exige sinergia entre la Administración y la sociedad”. Mencionó el plan ‘Euskadi Next’, “fruto del trabajo entre las instituciones vascas y la colaboración público-privada. Sobre la base de este proyecto compartido, llevamos dos años trabajando de forma constructiva con el Gobierno español, para conseguir que los fondos europeos se conviertan en un verdadero revulsivo para nuestra economía”, aseguró.

Durante la primera mesa de debate de la jornada, el director de Compras y Servicios y delegado institucional de Iberdrola en País Vasco, Asís Canales, subrayó que “es muy importante que nos aseguremos que después de esta cantidad ingente de dinero lo que vamos a conseguir es un territorio y un tejido industrial más competitivo”. Aquí, hizo hincapié en que “hay que dotarse de infraestructuras” y dijo que “la red eléctrica en su crecimiento proyectado con la tarifa actual no va a ser capaz de absorber toda la inversión que hace falta para alcanzar los objetivos de descarbonización y, por lo tanto, aprovechar estos fondos para la inversión en redes es muy importante”, remarcó.

Favorecer a los más carbonizados

Y en cuanto al tejido industrial, “tenemos que ver los sectores más carbonizados y tratar de que sean más favorecidos por los fondos”. “Hay que hacer infraestructuras de recarga de vehículos, pero también ayudar a la transformación de los parques de vehículos industriales y de transporte público”.

Mientras, José Ortega Carretero, socio responsable en País Vasco, Cantabria, La Rioja y Navarra de NTT DATA, afirmó que “es importante priorizar por dónde vamos a empezar y particularizar para cada tipo de compañía”. Recordó que en Euskadi el 75% de las pymes tiene una digitalización básica, el 56% media y el 30% avanzada. Además, se refirió a la problemática que suscita la “falta de talento para poder abordar los proyectos que vienen”. “Tecnologías como la Inteligencia Artificial, el Big Data, el Data Analytics, la robotización, necesitan perfiles para poder ejecutarlos, tenemos que ayudar a generar todo ese talento o reconvertir el talento de aquellos sectores que se han visto impactados”. Además, el directivo de NTT DATA demandó que se reduzca la burocracia para poder acelerar los proyectos. Los fondos “van a llegar, pero vamos a tener que correr”, remarcó.

Proceso lento

Teresa Madariaga, presidenta de Ingeteam, advirtió de que “de momento no ha llegado dinero a las empresas” de los fondos europeos, por lo que “va a haber que correr, porque todo el proceso de sacar las convocatorias de los Perte ha sido bastante lento, y el horizonte temporal de cuándo hay que acabar el proyecto no ha cambiado”. “Sería una pena que teniendo esta oportunidad luego haya que devolver estos fondos”, señaló

Madariaga observa “los fondos europeos como una oportunidad para sentar las bases de la recuperación económica, para acelerar y afianzar el proceso de la descarbonización y de la transición energética y para volvernos mucho más productivos”. Apostó por “poner al País Vasco como referente mundial en estas tecnologías en el sector industrial”.

Javier Contreras, consejero delegado de Nortegas, por su parte, enfatizó el papel de los Fondos ‘Next Generation’ como “una herramienta fundamental para poder llevar a cabo proyectos que van a ser disruptivos”. Indicó que “la agilidad y transparencia están arriba en la lista de peticiones”. Y “no solamente es que lleguen, es que tiene que haber tiempo para desarrollar esos proyectos”, que muchos son de nuevas tecnologías de hidrógeno o de biometano que “van a requerir tramitación de permisos por parte de las administraciones autonómicas o estatales y esos procesos se tienen que agilizar”, explicó. “La colaboración público-privada es esencial y para eso se tienen que reducir las trabas administrativas y burocráticas”, apostilló.

Guillermo Amann, adjunto al presidente y director de Relaciones Institucionales y Sectoriales de Ormazabal, expuso que las empresas han transcurrido por tres fases en relación a los Fondos Next Generation: entusiasmo, primero, frustración, después, y ansiedad, en la actualidad. “Todos entendimos que este tipo de fondos podía ser una oportunidad estupenda para una economía como la de Euskadi”, porque “los pilares básicos de los fondos encajan muy bien con la estrategia y con el tejido industrial”. Pero la burocracia ha sido tan brutal, que llega un momento en el que crees que esto no se va materializar”, alertó. Y “ya estamos en fase de ansiedad”, porque “no sabemos si vamos a llegar a todo”.

Por su parte, Carlos Bofill, socio del área de Subvenciones e Incentivos en Deloitte Legal y miembro del Deloitte European Center for Recovery & Resilience, resaltó “la excelente posición que tiene Euskadi para captar estos fondos, por la estructura del tejido económico del País Vasco, por la iniciativa pública-privada y por la propia estructura de los Perte”. Señaló que “la iniciativa público-privada puesta en marcha por el Gobierno vasco, más intensa que el resto de las Comunidades Autónomas, abarcando campos que coinciden con los Perte y contando con la colaboración del tejido empresarial, hace que se hayan generado ya grandes proyectos transformadores que son los que verdaderamente van a captar esos fondos”, dijo. Gracias a ello, los proyectos generados en Euskadi “cuentan con más impacto en las cadenas de valor y van a tener más capacidad de captar esos fondos”.

En la segunda mesa de debate, Elena Zárraga, presidenta de GAIA (Asociación Industrias Conocimiento y Tecnología), comentó que desde el primer momento “ya se atisbaban dudas sobre cómo los fondos iban a trasladarse al tejido productivo”. Por ello, la asociación detectó rápidamente la necesidad de empezar a capitalizar información, especialmente para que las pymes pudieran acceder a las ayudas. Esta función informativa la asumieron las entidades bancarias como Kutxabank, según explicó Iratxe

de Agirre, directora de Financing Solutions en este banco, y puso como ejemplo la plataforma que implementaron de forma gratuita que, entre otras cosas, acercaba a las empresas a las convocatorias para las que eran aptas. Reclamó, además, que los bancos tengan un papel definido en el proceso de gestión de los Next Generation, e incidió en la necesidad de que las compañías comiencen a trabajar en los proyectos que quieran desarrollar.

Factores para la anticipación

Por su parte, Ane Insausti, directora general del Centro de Nueva Movilidad Mubil, pidió acelerar la llegada de los fondos “o no llegamos al reto de cero emisiones en 2050” e hizo hincapié que en Euskadi hay factores para la anticipación e ir desarrollando proyectos hasta que puedan ver cómo se aplican finalmente los fondos Next Generation. Asimismo, confirmó que sus empresas ya están trabajando a la espera de que lleguen las convocatorias, al igual que las de GAIA, especialmente en los pocos casos concretos que ya están publicados.

Iñaki Barredo, director de Política de Cohesión y Fondos Europeos del Gobierno Vasco, explicó el gran potencial de la región y señaló que de los 140.000 millones todavía no se sabe cómo se van a gobernar 70.000 millones”. Para ello, pidió una mayor capacidad y libertad de gestión para las comunidades autónomas y aprovechar los instrumentos que ya existen en las Administraciones Públicas para dotarlos con más fondos. “Eso agilizaría mucho los temas y seríamos más eficaces y eficientes”, dijo.

María José Armendáriz, vicepresidenta del Clúster de Automoción de Euskadi (Acicae), también abogó por una mayor participación de las comunidades autónomas en la gestión de los fondos para “remar todos en la misma dirección” y comentó la posibilidad de mirar hacia otros países para “desatascar la situación”. Puso como ejemplo a Italia, que ha contratado expertos, o a Francia, que cuenta con un órgano de control de gobierno para dar seguimiento a la aplicación de las ayudas. Todos los participantes, además, abogaron por un sistema de colaboración público-privada. El consejero de Economía y Hacienda, Pedro Azpiazu, clausuró la jornada de elEconomista.es y criticó “la lenta llegada de la financiación europea”. Azpiazu señaló que “este segundo semestre de 2022 es clave para la implantación y aterrizaje de los fondos europeos, y hemos de ser capaces de dar con la tecla adecuada para ello”, deseó el consejero vasco.