La Salve desarrollará cerveza con txakoli junto a un productor vizcaíno

Un producto fusionado con txakoli de Bizkaia será el siguiente reto que abordará Cervezas La Salve, en línea con su apuesta continua por la innovación. Su último proyecto, que saldrá al mercado el próximo mes de abril, combina cerveza y café y se ha realizado en colaboración con la empresa Cafés Baqué.

La innovación desde la colaboración es el objetivo principal de Cervezas La Salve, empresa que nació en 1886 en Bilbao, desapareció en 1978 y resurgió en 2014 de mano de Jon Ruiz y Eduardo Saiz Lekue.

El proyecto empresarial cuenta con el apoyo de Mahou San Miguel, que posee un 42,7% en la cervecera, que fue clave para reabrir la fábrica en la capital vizcaína. La Salve es la segunda cervecera más antigua del país en activo y su vinculación con lo local forma parte de su ADN, según aseguran Eduardo Saiz Lekue y Jon Ruiz, impulsores de la nueva La Salve.

Y por esta razón, todos sus productos se gestan desde la óptica de la innovación y la colaboración con el entorno próximo. Su último proyecto, a punto de salir al mercado el próximo mes de abril, se ha realizado junto a la empresa vizcaína Cafés Baqué. Ambas compañías se han unido para crear un producto que combina café y cerveza, bautizado como Nitro Cold Brew Coffee.

Esta alianza surge de la apuesta por los productos innovadores elaborados con valores locales como forma de competir en un mercado global. Este producto pone el foco en el público joven, urbano y con una vida muy activa. El objetivo principal de esta nueva categoría de bebida es generar una nueva experiencia de usuario alrededor del café y de la cerveza y es tendencia en EEUU y Reino Unido.

Ni café ni cerveza

Nitro Cold Brew Coffee no es café y tampoco es cerveza, explican sus creadores. “Tiene su origen en infusionar el café en agua fría, suavemente durante 24 horas e incorporar nitro, para lograr una bebida que conserva todos los matices, todo el aroma y todas las propiedades junto a un punto de cremosidad y persistencia en la espuma que otorga una sensación de densidad”. La próxima primavera este producto estará en el mercado con los formatos de barril y lata de 25 cl. y se servirá en hostelería.

El siguiente reto que abordará La Salve será la fusión de cerveza y txakoli. Este desarrollo se hará en colaboración con una bodega vizcaína del citado vino blanco.

En línea con las alianzas y la colaboración, La Salve trabaja junto al centro de tecnología marina y alimentaria Azti, que ha cumplido 40 años de actividad, desde 2015. A los ocho proyectos iniciales de innovación en torno al kilómetro cero y la calidad se han sumado otros dos nuevos proyectos centrados en la innovación ligada al producto. La empresa cervecera bilbaína también realiza investigaciones con el centro Neiker, instituto vasco de desarrollo agrario.

Destaca una iniciativa que impulsa con la Asociación Vasca de Cerveceros-Basque Beer, para la recuperación de las plantaciones de lúpulo en Euskadi, en el marco del proyecto Lupulus, financiado por el Gobierno vasco. Se está desarrollando una prueba piloto en Berantevilla (Álava), para ver qué producción es posible en las condiciones climáticas del territorio.

Precisamente, uno de los objetivos de Basque Beer, que suma 14 asociados, es impulsar la regeneración del sector cervecero vasco. En este sentido, La Salve y la Universidad del País Vasco han creado el Observatorio Vasco de la Cerveza para estudiar la cadena de valor de este producto. Asimismo, La Salve es socia de la Agencia Vasca de la Innovación-Innobasque y participa en diferentes proyectos en materias como la innovación en modelos de negocio o los retos de la digitalización en la industria de la alimentación.

Unidad alimentaria en Torre Bizkaia

Por otra parte, la empresa cervecera estará presente en el proyecto Torre Bizkaia, centro internacional de emprendimiento de Bilbao, junto a Kaiku y Eroski y otras grandes compañías y organismos. El objetivo del centro es impulsar empresas innovadoras y atraer talento.

La pandemia ha traído muchos cambios en los hábitos de consumo y ha acelerado proyectos fijados para más adelante. Entre ellos, el servicio a domicilio de La Salve.

“Era un proyecto que teníamos pensando realizar y estudiado con Innobasque. Pero en marzo de 2020, el cierre de hostelería y una caída de ventas del 70-80%, las tiendas sin cerveza y nosotros con el almacén repleto. Fue la ocasión de poner en marcha la venta a domicilio”, explica Eduardo Saiz Lekue. Hoy esta distribución concentra el 15% de las ventas totales.

El objetivo de La Salve es ser la cerveza referente en Euskadi. “Bilbao es una marca que proyecta, convence y despierta interés. La calidad y marca de Bilbao tiene buena llegada fuera y por eso vendemos en Asturias, Galicia, Madrid y Barcelona”, comenta el gerente de la compañía.

En este sentido, La Salve busca la diferenciación apoyada en los valores y en la calidad de producto. “Compromiso con el entorno sostenible y el productor local. Gozamos de buena salud de marca, nos valoran y premian. El reto es mantener esa identificación con el consumidor a futuro”, asegura Saiz. En esta línea, se celebrará con carácter anual la feria Bilbao Bizkaia Beer Meeting para favorecer el auge de la industria cervecera. Su primera edición fue el pasado octubre y reunió a 50 cerveceras y se vendieron 4.000 litros de cerveza.

Dentro del compromiso social y con el entorno, La Salve ha suscrito un acuerdo de colaboración con Bilbao Basket por el que patrocinará al club de baloncesto durante esta temporada y la siguiente.

Edición especial Bilbao Basket

Como el lema del acuerdo Juntos, más fuertes, apuestan por poner en valor su origen y tener a la ciudad de Bilbao como nexo de unión para impulsarse desde lo local y generar sinergias y poner en marcha un potente plan de acción conjunto”, comentan los firmantes del acuerdo.

La primera de las acciones consistirá en la comercialización de una edición especial de La Salve con una etiqueta que incluye la imagen de Bilbao Basket. La cerveza irá en caja de 12 botellas y junto al lanzamiento se incluirá una bandera del equipo de baloncesto, con el fin de que los locales de hostelería la luzcan durante los encuentros deportivos.