Aleovitro producirá cannabis de calidad para uso farmacológico y cosmético

La biotecnológica se une a los trece laboratorios en España que cuentan con autorización de la Agencia del Medicamento, la mayoría, grandes centros de investigación o multinacionales.

Aleovitro, compañía biotecnológica ubicada en el Parque Tecnológico de Bizkaia, y el Instituto de Ciencias Agrarias, integrado en el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), han obtenido la autorización de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) para investigar sobre nuevos usos farmacológicos del cannabis.

Estas organizaciones se unen al grupo de centros en España que cuentan con dicha aprobación, un total de 14 laboratorios en su mayor parte ligados a grandes centros de investigación o multinacionales y que tienen detrás un músculo económico o inversores que respaldan su proyecto.“Que una micropyme como nosotros haya sido capaz de obtener una autorización de este nivel es meritorio y nos da una reputación y una dimensión internacional”, afirma Eneko Ochoa, fundador de Aleovitro, junto a Antonio Laso.

La biotecnológica vizcaína se autofinancia, ya que desarrolla dos actividades, la de I+D en químicas y plantas, en la que se encuadra el proyecto con el cannabis, y otra línea dedicada a la investigación sobre la malaria. “Muchas plantas tienen diversas aplicaciones como pueden ser biopesticidas, cosmética, etc, y llevamos 10 años colaborando con el CSIC. Nuestra línea de investigación es seleccionar estas plantas por su contenido químico para diferentes aplicaciones y el cannabis es una más, que ahora puede convertirse en línea de negocio”, explica Ochoa.

Múltiples líneas de investigación

La Agencia Española de Medicamentos ha aprobado dos medicamentos basados en derivados o componentes del cannabis y se están desarrollando líneas de investigación en el mundo. Se estima que el mercado de estos productos podría superar los 2.400 millones de euros en Europa en tres años.

Además de estrictos controles de supervisión y seguimiento, para obtener estos derivados del cannabis se requieren materia prima con unos estándares de calidad muy elevados, homogéneos y estables de cara a su producción comercial. Y Aleovitro y el CSIC están autorizados para proporcionar esta materia. Con el proyecto aprobado, los profesionales especializados en química orgánica y biología de ambas organizaciones pretenden obtener una serie de nuevas plantas de cannabis, denominadas quimiotipos élite. Posteriormente, Aleovitro procederá al registro y protección intelectual de sus variedades de plantas.

Su objetivo es registrar dos patentes este año y ya cuenta con empresas interesadas de Canadá y Colombia. También solicitará una licencia de propagación y de producción in vitro de sus selecciones.