El sector eólico europeo deja en Euskadi un impacto económico de 19 millones

La celebración de la segunda de edición de ‘WindEurope’ en Bilbao superó sus expectativas. La feria del sector eólico reunió a más de 9.000 profesionales procedentes de 78 países, que generaron un impacto económico de 19 millones. La industria vasca volvió a destacar por su capacidad tecnológica e industrial.

WindEurope cerró su edición de 2022, celebrada entre el 5 y 7 de abril en Bilbao Exhibition Centre (BEC), mejorando sus previsiones de participación en un momento decisivo para el sector de la energía eólica. Más de 9.000 profesionales procedentes de 78 países acudieron al evento durante los tres días, generando así un impacto económico de más de 19 millones de euros en términos de Producto Interior Bruto.

Esta cifra se logró por la internacionalidad de los asistentes: más de un 50% procedía de fuera del Estado y los países con mayor representación fueron Reino Unido, Alemania, Francia, Dinamarca, Países Bajos, Bélgica, Noruega, Italia y Estados Unidos.

Los participantes contaron con un programa de conferencias con más de 300 ponentes y una oferta de 330 expositores de toda la cadena de valor de la energía eólica. Con la última tecnología presentada en WindEurope 2022, el sector tiene la capacidad de lograr la seguridad y dependencia energética.

Objetivos climáticos y energéticos

El evento se ha celebrado en un momento decisivo para poder cumplir los objetivos climáticos y energéticos fijados en Europa.

La energía eólica será una tecnología clave en la transición energética y, de forma específica, para alcanzar el objetivo del 40% de contribución de las energías renovables definido por el escenario Fit for 55 (reducción de un 55% en las emisiones de CO2) de la Comisión Europea (CE).

En la actualidad, Europa cuenta con 236 GW de potencia eólica instalada que cubren el 15% de la demanda eléctrica (25% en el caso del sistema eléctrico español). Los objetivos de la CE a 2030 requerirán alcanzar al menos los 453 GW, el 18% en parques offshore, lo que significará instalar una media de 8,5 GW offshore anuales de aquí al 2030.

El Rey Felipe VI inauguró WindEurope Bilbao 2022, la cumbre europea del sector eólico celebrada en un momento “clave a nivel mundial”, en el que la búsqueda para la creación de un nuevo modelo económico “más independiente del exterior, señala a las renovables, y en concreto a la energía eólica, como parte de la solución que configurará el futuro orden energético mundial”, según sus organizadores.

Así, el clamor general del evento fue la exigencia de la industria de agilizar los trámites para producir energías renovables con mayor celeridad y conseguir reducir la dependencia energética de Europa, agudizada por el conflicto bélico que mantienen Rusia y Ucrania.

Antes de la inauguración oficial se celebró otro acto de apertura en el que participaron la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, la consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco, Arantxa Tapia, la directora general de Energía de la Comisión Europea, Ditte Juul Jorgensen, el presidente de WindEurope, Sven Utermöhlen, y el presidente de la Asociación Empresarial Eólica (AEE), Juan Diego Díaz.

Necesidad de acelerar la transición

Teresa Ribera indicó que los próximos retos a superar por la eólica a corto plazo son los problemas en la cadena de suministro, la agilización de permisos, el potencial de la offshore, así como mantener y aumentar el liderazgo de la eólica. Asimismo, destacó la necesidad de acelerar la transición energética donde las renovables, y en concreto, la eólica juegan un papel “importante” en ello.

En ese sentido, la directora general de Energía de la Comisión Europea, Ditte Juuk Jorgensen, apuntó a la eólica como “pieza clave” para alcanzar los objetivos de la transición energética en Europa.

Por su parte, Arantxa Tapia afirmó que la guerra de Ucrania hace “cada vez más apremiante” el desarrollo de las energías renovables y añadió que se viven “tiempos convulsos” y un momento “crucial” para consolidar estrategias energéticas que permitan reducir la dependencia de recursos externos. Esta sesión finalizó con un panel de debate con los ministros y secretarios de Estado de Energía y Clima de Alemania, Irlanda, Bélgica, Rumanía, Portugal, junto con la directora general de Energía de la Comisión Europea y los embajadores del evento.

Marcos regulatorios claros y estables

Felipe VI, tras ser recibido por el lehendakari Iñigo Urkullu y demás autoridades, visitó varios stands de la feria como el de Basque Country, Asociación Empresarial Eólica, Repsol, Ingeteam, Siemens Gamesa, Iberdrola, Corio y WindEurope. El presidente de Iberdrola, Ignacio Galán, mostró al Rey los proyectos en los que trabaja la compañía.

Antes, el director gerente de Iberdrola Renovables, Xabier Viteri, reclamó eliminar “muchas barreras políticas” para el desarrollo de las energías renovables como la eólica y pidió “marcos regulatorios claros y estables”. En este sentido, advirtió que cualquier cambio “inesperado” en las reglas provoca “incertidumbre” y se traducirá en una “reducción del despliegue” de nueva capacidad renovable.

El responsable de Iberdrola Renovables manifestó que aunque han pasado “muchas cosas” en los últimos tres años -desde la última WindEurope en Bilbao-, la conclusión es que “la electrificación con renovables es la forma más rentable de descarbonizar la economía”. Destacó Viteri la “urgente” necesidad de reforzar la seguridad del suministro y reducir la dependencia energética.

Por su parte, el CEO de Siemens Gamesa, Jochen Eickholt, demandó “pasos claros y decididos” para contar con una industria eólica “resistente y sostenible” en Europa, entre ellos, aumentar el volumen del mercado de turbinas, porque los “bajos” volúmenes “socavan” el Green Deal, acelerar los procesos de concesión de permisos y cambios en las subastas eólicas.

Aumento del volumen del mercado

Eickholt destacó el potencial de la industria eólica, pero cree que existe un “pero muy grande” porque, aunque las perspectivas son “muy fuertes”, el escenario a corto plazo es “muy diferente”. Según subrayó, se necesita un aumento del volumen del mercado. El CEO de Siemens Gamesa detalló que para alcanzar su objetivo del 40% de energía renovable para 2030, la UE necesita construir 30 GW de nueva energía eólica al año. Sin embargo, el año pasado solo se construyeron 11 GW.

Además, Eickhot dijo que debido a los pequeños volúmenes que se ofrecen en las subastas europeas, hay una “fuerte competencia” que lleva a unos precios de las ofertas “muy bajos”. También solicitó que se aceleren los plazos de autorización.