Ibermática mantendrá su estrategia en servicios y compras de empresas

La compañía aumentó sus ingresos, beneficio bruto y volumen de contratación en 2020 y, además, logró crear 270 puestos de trabajo. En la inversión de seis millones de euros en nuevas líneas de oferta reside parte del éxito de las cifras positivas obtenidas, resultado que prevé incrementar este ejercicio.

Ibermática, compañía que opera en el sector TIC, cerró el año del coronavirus con crecimiento en todos los conceptos de su negocio, además de crear casi 300 empleos. Con nuevo plan a 2022, la firma vasca prevé seguir con cifras positivas y al alza y continuará con su estrategia de adquisiciones y lanzamiento de servicios para posicionarse en el mercado.

Así, en 2020, a pesar de haber sufrido una importante contracción del mercado, retrasos en la ejecución de algunos proyectos por causas ajenas, y haber incrementado los gastos para hacer frente al coronavirus, logró aumentar sus ingresos un 7,7%, pasando de 240 millones de euros en 2019 a 258,4 millones el pasado ejercicio. Su beneficio bruto creció un 21,7%, de 6 millones a 7,3 millones; y el ebitda (beneficio antes de impuestos) un 37%, desde los 13,3 millones en 2019 a los 18,2 millones en 2020, el dato más alto de los últimos diez años. Además, aumentó su volumen de contratación en 6,1 millones de euros, hasta los 226,4 millones, y creó 270 empleos, con lo que suma ya 3.788 profesionales.

Inversión en nuevas líneas

El director general y consejero delegado, Juan Ignacio Sanz, señaló a las nuevas líneas de oferta lanzadas en el marco del plan estratégico 2018-2020 como responsables del incremento de ingresos. En este sentido, recordó que se invirtieron seis millones en estos nuevos servicios, “que nos han permitido ganar contratos por 80 millones de euros”. De cara a 2021, Ibermática prevé seguir creciendo “para alcanzar los 270,6 millones de euros de ingresos, con un beneficio antes de impuestos de 10,7 millones y un ebitda de 24 millones, logrando un volumen de contratación de 395 millones de euros”, adelantó Sanz.

En su nuevo plan a 2022, continuará con la misma estrategia y con el aumento de sus principales dígitos empresariales. Para lograrlo, la compañía potenciará las líneas de oferta creadas alrededor de tecnologías como Analytics, Inteligencia Artificial, DevOps o Hybrid IT, entre otras. “Asimismo, seguiremos con nuestra política de compra de empresas, tras las completadas con IDS en 2018 e ITS Security en 2020, un elemento fundamental para que una compañía crezca y se desarrolle en el futuro”, según el consejero delegado de Ibermática.

En este sentido, Sanz aseguró que se encuentra en negociaciones con varias empresas para la próxima adquisición de una compañía del sector de analítica de datos, operación que se completará este año “aunque no antes del verano”.

Unidad para los fondos europeos

Ibermática también ha lanzado la unidad Next Ibermática, en la que un equipo de expertos impulsa proyectos de digitalización susceptibles de captar fondos europeos, acompañando a sus clientes durante todo el proceso de presentación y ejecución.

En 2020 la compañía sumó su octavo año consecutivo entre los proveedores de outsourcing TI mejor valorados por las empresas, según el ‘ranking’ elaborado por Quint y Whitelane Research. Además, Ibermática se consolida como una de las cincuenta mejores empresas para trabajar en España en 2021, según el último estudio publicado por la revista Forbes, para el que se han tenido en cuenta las opiniones de los empleados de más de 2.000 empresas con más de 500 personas en plantilla.

Por otra parte, Ibermática ha desarrollado un software que permite el mantenimiento y operación de entornos industriales complejos y remotos mediante Realidad Aumentada. “En un sector industrial cada vez más internacionalizado, con sedes y clientes repartidos por el mundo, este sistema trae consigo una importante reducción de costes asociados a mantener personal muy especializado en ubicaciones remotas, o al tiempo y gastos de viaje que implica el desplazamiento del experto hasta la ubicación de la máquina, o a la pérdida de capacidad productiva mientras la máquina y el proceso asociado están parados, entre otras cosas”, explican desde la compañía vasca.