El sector de máquina-herramienta
crecerá un 15% este año

Tras caer la facturación casi un 20%, el ritmo de pedidos registrado desde octubre hasta abril hace prever unas cifras similares a los niveles de 2019 para el conjunto de 2021.

La facturación del sector de máquina-herramienta cayó un 19,65% en 2020, alcanzando los 1.324,12 millones frente a los 1.647,86 millones del ejercicio anterior, según los datos ofrecidos por el presidente de la Asociación de Fabricantes (AFM), César Garbalena. Para este ejercicio, el fuerte crecimiento de la demanda en el mercado chino y las expectativas por el plan de impulso de la economía americana de Joe Biden apuntan a una recuperación de la economía mundial.

“Si el segundo trimestre continúa con la buena captación de los últimos seis meses, las expectativas de crecimiento de la facturación para 2021 se colocarían en torno a un 12%-15%, aproximándonos a los niveles alcanzados en 2019”, explicó Garbalena. Los pedidos registrados en 2020 disminuyeron un 23,5% respecto a 2019 y por subsectores, deformación tuvo un descenso del 34,7% y el arranque, redujo la captación en un 17,65%. “A partir de octubre de 2020, los pedidos empezaron a recuperarse, dinamismo que se ha mantenido a lo largo del primer cuatrimestre de este año, con cifras similares de captación a 2019”, detalló el presidente de AFM. “Nuestros paneles de prospectiva apuntan a una previsión de fuerte crecimiento de la captación de pedidos cercana al 25% en el conjunto de 2021”.

El empleo se mantuvo en 7.589 empleos directos, con una caída del 5,21% que “se está recuperando” en los primeros meses de 2021. Las exportaciones descendieron un 22,25% hasta los 1.006,01 millones frente a los 1.293,93 de 2019, y suponen casi el 76% de la producción. Las ventas interiores bajaron un 13,41% y los pedidos disminuyeron un 23,5% con respecto al ejercicio precedente.

Décimo productor y exportador mundial

Pese al embate de la pandemia, España se ha mantenido como décimo productor y exportador mundial. Respecto a los sectores usuarios, aunque el sector del automóvil recuperó enérgicamente niveles de actividad tras la parada, la transición hacia motorizaciones eléctricas e híbridas y los cambios relacionados con el modelo de movilidad dificultan la predicción de la demanda de vehículos, lo que ralentiza las inversiones. El sector aeronáutico, por su parte, acusa el impacto del descenso de la movilidad y, salvo en defensa, las previsiones no son buenas para los próximos 2-3 años. El sector ferroviario atraviesa un buen momento y energético registra un avance hacia fuentes renovables.