‘Basque Green Deal’, el modelo vasco hacia la sostenibilidad
Mientras la economía va sobreponiéndose al embate de la pandemia y adaptándose a la ‘nueva’ realidad, los diferentes gobiernos van diseñando y lanzando las que serán las palancas que les posicionen en ese escenario. Y la sostenibilidad va a ser, sin ningún tipo de duda, el pilar de ese nuevo modelo económico.
El término no es nuevo, desde luego, pero hasta que llegó la pandemia se pronunciaba susurrante y se percibía como el eco en la lejanía, como una necesidad futura con todavía un largo camino por recorrer. La crisis actual ha demostrado que es y será imprescindible en las diferentes transformaciones económicas.
En esta línea, Euskadi se ha sumado al Pacto Verde Europeo y ha propuesto su propia hoja de ruta para logar un futuro más sostenible. Y dentro de esta hoja de ruta está el Basque Green Deal, el modelo vasco para un desarrollo económico justo y sostenible.
Este modelo recoge los objetivos de reducción de emisiones y de generación de energía renovable, pero no se limita a esos ámbitos: nace como modelo económico ligado a la industria y a la tecnología.
Este nuevo modelo precisará de un nuevo contexto normativo y, por ello, el Gobierno vasco trabaja en una nueva Ley de Transición Energética y Cambio Climático, alineada con las directivas e indicadores europeos. De esta manera, se podrá avanzar en los objetivos de reducción de emisiones y de generación de energía renovable, y la Ley estará inspirada en el principio de neutralidad tecnológica.
La consejera de Desarrollo Económico, Sostenibilidad y Medio Ambiente del Gobierno vasco, Arantxa Tapia, ya adelantó algunas grandes líneas de esta estrategia sostenible en su participación en el ‘V Foro Industrial País Vasco’, que celebró el diario elEconomista en Bilbao.
Tapia reclamó a los presentes, representantes empresariales, institucionales, financieros y del ámbito universitario y tecnológico, entre otros, esa necesidad de avanzar hacia una economía más sostenible, más renovable y más digital e inteligente; es más, la consejera solicitó a las empresas que aceleren en ese recorrido hacia la sosteniblidad y en su apuesta por la I+D+I, fórmulas indispensables y vitales para la nueva era económica.
Los participantes en sendas mesas de debate ejemplificaron como la sostenibilidad está ya en los planes presentes y futuros de sus organizaciones y cómo los criterios ASG, ambientes, sociales y de gobierno corporativo, priman cada vez más en el desarrollo de su actividad.