Jon Ander Egaña, director general del Clúster
de Alimentación de Euskadi: “Aunque lo parezca,
el sector de distribución alimentaria no ha hecho el agosto”

El sector alimentario mostró su resiliencia al asegurar el abastecimiento durante el confinamiento, gracias a las inversiones productivas, logísticas, sanitarias y humanas realizadas. Pero aunque las ventas crecieron un 7%, no aumentó igual el beneficio, afirma el director general del Clúster de Alimentación vasco, Jon Ander Egaña

Ha sido uno de los sectores protagonistas desde la llegada del coronavirus y ha cumplido su función de abastecer a la población. El director general del Clúster de Alimentación de Euskadi, Jon Ander Egaña, repasa la situación actual y presenta las líneas generales del nuevo plan estratégico para 2020-2023. Además, asegura que las empresas se han reforzado y están mucho más robustas para aguantar lo que pueda venir.

El clúster está de estreno con nuevo plan estratégico 2020-2023. ¿Cuál es el cambio fundamental que se introduce en el mismo respecto a estrategias anteriores?

El plan estratégico 2020-2023 es el tercero que elaboramos y cobra gran importancia el concepto de cadena de valor, que es lo que nos pone en el mapa de la alimentación. En Euskadi tenemos un sector primario, ganadero, pesquero y agrario, de dimensión pequeña en comparación con el resto del Estado. El siguiente eslabón es la transformación de la industria alimentaria, dividida en seis subsectores, algunos productos se suministran de ese sector primario. Son unas 1.500 empresas que vertebran toda la cadena y en medio está la logística y luego la distribución, la llegada al consumidor. Aqui tenemos el retail o venta en tienda minorista, organizado en grandes superficies como Eroski, Uvesco y Carrefour, que están dentro del Clúster, y el canal horeca, para el consumo fuera del hogar, empresas de colectividades, hostelería y restauración. Además están las empresas que dan servicio como laboratorios, instalaciones frigoríficas, bienes de equipo y centros tecnológicos y agentes del conocimiento. Todo esto sería nuestro terreno de juego del sector de la alimentación.

¿Y en términos económicos que supone?

En total todos los subsectores mencionados suponen el 10,7% del PIB y generan en torno a 140.000 empleos directos. Coger la alimentación en su conjunto como sector es lo que nos pone en el escenario económico.

El de alimentación es un clúster relativamente joven respecto a otros que operan en Euskadi. ¿A qué es debido está diferencia de edad?

El alimentario es el quinto sector industrial en Euskadi, frente al primero en el Estado y en Europa. Históricamente en el País Vasco hay otros sectores con mucho más peso como siderurgía, automoción, energía y aeronáutica y por eso fueron los primeros clústeres que se crearon hace ya más de 27 años. Ya en el año 2009 se produce una apertura de esa experiencia a otros sectores que ven pueden ser también estratégicos y con futuro. Y ahí estaba la alimentación, que estaban elaborando un plan estratégico de calidad de las industrias alimentarias. Pero el salto importante se produjo con la estrategia RIS-3, donde la alimentación fue identificada como territorio de oportunidad, junto a los tres grandes sectores: fabricación avanzada, biociencias ligadas a la salud y energía, y con el reconocimiento a la cadena de valor en su conjunto. A partir de ahí fue cogiendo peso el sector, un sector complejo en tipología de empresas y tamaños. Y a diferencia de otros clústeres en el de alimentación todo acaba en el consumidor, en otros sectores como automoción o aeronáutica no tienen esa conexión directa con el consumidor, y no va con los ciclos económicos. Nuestro crecimiento está mucho más influenciado por el crecimiento demográfico; comemos todos los días, pero si no cree la población no crece el mercado.

¿Qué número de asociados maneja?

Somos 110 empresas, porque somos un clúster joven muy centrado en consolidarnos y en trabajar con la industria alimentaria, eslabón de la cadena que supone en torno al 60-65% de los asociados. En el nuevo plan estratégico vamos a hacer un acercamiento para conocer mejor la estructura de los otros eslabones. El objetivo es ser referente y para ello queremos entender bien como están estructurados el resto de eslabones y buscar modelos de relación más flexibles para jugar el papel de vertebración del sector.

Ha citado con anterioridad cadenas de distribución alimentaria como Uvesco, Eroski y Carrefour. ¿Qué pasa con el resto que opera en Euskadi y está desplegando un crecimiento e inversiones en el mercado?

Somos el clúster de alimentación de Euskadi y los parámetros que utilizamos para asociarse son que las empresas sean del sector de alimentación y que tengan su sede fiscal en Euskadi, es decir, arraigo en el territorio. Eroski y Uvesco son nacidas en Euskadi y Carrefour tiene la sociedad Carrefour Norte ubicada en Erandio-Bizkaia y está posicionado con el producto local y vinculado al territorio. Con estos tres operadores abarcamos el 65-70% de la superficie comercial que hay en la comunidad autónoma en alimentación. En el futuro no descartamos que otras cadenas puedan entrar al clúster, porque si están generando empleo, pero la aportación y la tracción con el entorno, producto local, etc. tiene que aumentar. Eroski, Uvesco y Carrefour tienen en sus estrategias y ADN el tema del impulso al producto local.

¿Cuál es el objetivo principal del clúster en línea con el nuevo plan estratégico?

Hemos elaborado el plan 2020-2023 de forma participativa con los socios en la definición de la misión y los valores. Queremos mejorar la competitividad de las empresas asociadas, como todos los clústeres, promoviendo la generación de valor añadido y la orientación al mercado. Como sector no podemos competir ni en precio ni en volumen, por eso tenemos que generar valor añadido a través de la I+D y ese valor y la calidad de los productos y el ligazón con la gastronomía, y todos esos valores trasladarlos al lineal. Y en cuanto a orientación al mercado, vemos que somos buenos fabricando productos de calidad pero nos faltan herramientas comerciales. Entender como funciona la distribución, abrir nuevos canales de venta, la internacionalización, etc.

¿Qué reciben los asociados por pertenecer a la organización empresarial?

Hemos preguntado a los socios que es lo que buscan en el clúster y destacan la integración sectorial, el punto de encuentro que supone para hacer networking, etc. También destacan su valor como nodo de conocimiento, sobre tendencias de mercado, evolución de temas legislativos, área de calidad, demandas del consumidor, nuevas normativas, herramientas de financiación, etc. Y todo eso les ofrecemos. Además, el clúster funciona como punto de pivotaje e interlocución con otros agentes y con la administración. Y luego están las colaboraciones con terceros. Facilitamos espacios de encuentro para la cooperación. Somos pequeños, incluso la más grande es pequeña, y si queremos ser competitivos tenemos que cooperar.

¿Tienen acuerdos con otras entidades o asociaciones para ofrecer más servicios?

Por supuesto, tenemos colaboraciones con terceros. Por ejemplo con Laboral Kutxa, acuerdo por el que la entidad financiera ofrece líneas especiales de financiación en condiciones preferentes, además de herramientas útiles para avanzar en el desarrollo de proyectos empresariales. También colaboramos con Cuatrecasas en temas legislativos y en el área de tendencias de mercado con la consultora C4E, partner del Observatorio en cuestiones de Mercado, Consumidor y Producto.

Respecto de la pandemia, el sector alimentario realizó un gran esfuerzo para asegurar el abastecimiento durante el confinamiento.¿Considera que está preparado para afrontar un nuevo embate?

En esos momentos hubo mucha tensión e incertidumbre porque faltaban EPIs para las medidas de seguridad, protocolos, etc. y, a pesar de todo, la cadena dio el callo. Se reforzaron todas las medidas higiénico sanitarias, todo el tema de logística, producción, recursos humanos, etc. Ahora ya no nos coge de nuevos, se han reforzado planes y la situación es mucho más robusta para aguantar lo que pueda venir. El sector de distribución español fue el que menos rupturas de stock tuvo, detrás de Canadá y aguantó el tirón como señal de robustez de la cadena.

A pesar del incremento del 7% en ventas, las empresas aseguran que no se refleja en su rentabilidad.

Depende del subsector. Por ejemplo el canal horeca, hostelería y restauración, que supone el 5%, está fastidiado como sector y todos los proveedores que están detrás de él. La industria alimentaria les provee a ellos y se les cae la mitad del negocio. La distribución si que está creciendo, en torno a un 7% las ventas, pero no en beneficios porque el incremento en ventas va parejo con el incremento en costes en logistica, en contratar más gente para los pedidos online, medidas higiénico-sanitarias, etc. Que no parezca que han hecho el agosto. El que más el que menos tenía ventas en horeca que se le han caído y los márgenes no son los mismos por mucho que incrementes en retail. Pero es cierto que el sector de alimentación no está tan mal como otros sectores estratégicos. Se come y se bebe todos los días y todo lo que estaba en el lineal se ha vendido bien.

En cuanto a adopción de nuevas tecnologías, ¿qué pasos se han dado este año?

Hay un marco estratégico para la digitalización de la cadena de valor del Gobierno vasco. En esa línea, hemos puesto en marcha un proyecto en el ámbito comercial y de marketing, con la idea de incorporar al consumidor y ayudar a las empresas a vender más y mejor. Las tecnologías 4.0 pueden ayudar a interactuar con el consumidor y hemos juntado a 14 empresas y sus directores de marketing y comerciales, con una empresa tecnológica para determinar sus necesidades. Por otra parte, el ecommerce se ha disparado durante la pandemia. Partimos de una posición baja pero ha crecido y ha venido para quedarse. Habrá que ver cómo tengo que estar como empresa, con quién, qué recursos me hacen falta, etc. Crecen las grandes plataformas y operadores y eso te fuerza a estar en muchos canales a la vez.

¿Cuáles son los retos y tendencias futuras que se observan en el consumidor y en el mercado?

El pasado septiembre celebramos una jornada con Innobasque, la Agencia Vasca de la Innovación, para saber qué está pasando en el mercado y anticiparnos a las nuevas necesidades del consumidor. La jornada acogió la presentación del segundo Informe de Tendencias y Casos del sector de Alimentación y Bebidas, elaborado por el Observatorio Estratégico del Clúster, donde se recogieron los múltiples casos de innovaciones surgidas en el mundo a raíz de la situación provocada por la Covid-19. Entre otras iniciativas, la apuesta de la restauración por experiencias de consumo más personales y hogareñas, la utilización de nuevas redes sociales y otros espacios (e-sports, gaming, etc.) que empiezan a explorar las marcas de alimentación, la demanda en continuo de los productos con beneficios adicionales para la salud, o la evolución hacia un packaging más sostenible. En el apartado tecnológico se analizaron las soluciones de inteligencia artificial que ayudan a predecir y optimizar el consumo, las nuevas herramientas para gestionar los residuos, la tecnologización del supermercado con avances como el reconocimiento facial o la compra por voz, o la digitalización de sectores más tradicionales como la agricultura, la ganadería o la pesca.

Para finalizar, ¿qué le parece la compra del 50,1% de Angulas Aguinaga por parte de Pai Partners?

Angulas Aguinaga tiene un plan estratégico muy ambicioso, una forma de pensar de gran empresa que tiene que crecer, internacionalizarse, diversificarse, etc. Para nosotros es un referente a nivel estatal y es una suerte tenerlos en el clúster de alimentación con la disposición que tienen siempre sus directivos para ayudar y colaborar.