Petronor reconoce el papel del empresario frente a ETA

El lehendakari Iñigo Urkullu ha escrito el prólogo del libro ‘Los empresarios y ETA, una historia no contada’, editado por Petronor. La publicación pretende destacar y reconocer el papel del empresariado vasco en la lucha contra la banda terrorista

Un total de once capítulos y el prólogo del lehendakari vasco presentan un relato de la compleja realidad vivida en la sociedad con el terrorismo de ETA. Petronor ha editado este libro ‘Los empresarios y ETA, una historia no contada’, para ayudar a entender lo acaecido hace 50 años y las consecuencias que provocó.

Los relatos repasan diferentes cuestiones como el contexto socio económico del momento, las consecuencias que tuvo en la economía y el daño económico que se produjo. “Todo ello sin dejar de lado el tremendo impacto que tuvo en las persona y familias que se vieron golpeadas por la violencia y que, de una u otra manera, cambió sus vidas para siempre”, explicó Emiliano López Atxurra, presidente de Petronor.

En la presentación del libro estuvo acompañado por el profesor y abogado Juanjo Álvarez, y el director de relaciones institucionales y comunicación de Petronor, José Ignacio Zudaire. Además, la publicación recoge un recorrido por Álava, Bizkaia, Gipuzkoa y Navarra, “ya que cada territorio con diferentes matices vio lastrada su cotidianidad con atentados de toda índole, desde las amenazas y los secuestros, hasta los asesinatos”, dijo Atxurra.

Injusticia y sufrimiento inhumano

Iñigo Urkullu realiza en su escrito un reconocimiento a "la resistencia democrática" del empresariado vasco ante los años vividos en Euskadi de violencia de ETA y destaca “la injusticia y el sufrimiento cruel e inhumano que sufrió este colectivo, con la extorsión y la amenaza de muerte indefinida". Además, el lehendakari asegura que la banda y quienes consideraron lícito el terrorismo., “tienen una enorme deuda con el pasado y deben reconocer el mal causado injustamente”. En este sentido, afirma que estos "crímenes se ampararon en una estructura ideológica perversa que consideró que matar, atacar o extorsionar a un semejante era un medio legítimo para obtener fines políticos”.