¿Qué es el ‘scrip dividend’ y por qué está de moda?

Permite a los accionistas recibir su retribución en acciones. Para las compañías limita la salida de liquidez, clave en momentos como el actual.

La llegada de la crisis en 2020 ha zarandeado la histórica trayectoria de dividendos de las firmas españolas como solo sucedió antes en 2012 -ante las dudas sobre el euro- y en 2008 y 2009 -tras la quiebra de Lehman Brothers-. Pero ahora la situación de incertidumbre es tal que quien no ha cancelado de raíz sus pagos, ha vuelto a recuperar el scrip dividend o pago en acciones de la compañía como una opción para evitar salidas de caja innecesarias en un momento en el que todavía falta visibilidad para la segunda parte del año. Este el caso de Telefónica, el dividendo más famoso de todos los nacionales -retribuye a sus accionistas con dos pagos de 0,20 euros al año-, que recuperó su abono en especie este año, sin amortizar sus títulos, lo que implica que sí o sí quien no acuda a las dos ampliaciones de capital que realiza, se diluirá en el capital.

Pero, ¿en qué consiste exactamente el scrip dividend o dividendo flexible de las cotizadas? Tradicionalmente, las compañías han destinado un porcentaje determinado del beneficio -que se conoce como ratio de payout- a repartir entre sus accionistas. La diferencia crucial con un programa de dividendo flexible es que la salida de liquidez para la compañía es menor. La firma cotizada, si el inversor así lo decide, sustituirá el pago en efectivo por acciones de la compañía por el mismo importe del abono en metálico. El inversor tendrá, por lo tanto, más títulos de su empresa, aunque el capital también será superior. Si la compañía no amortiza las acciones que han llegado nuevas a través de la ampliación de capital -necesaria para poder retribuir en acciones a los inversores- quien cobrara su dividendo en efectivo se diluirá dentro del capital. En caso contrario, si la cotizada cuenta con un programa de recompra de acciones -que puede ser parcial o total- lo que está haciendo es drenar del mercado ese exceso de títulos. Es importante también tener en cuenta el tratamiento fiscal de los dividendos. Hay que pagar por ellos a Hacienda, mientras que si se cobran en acciones sólo se debe pagar por las plusvalías una vez vendidas. Los dividendos están considerados rendimientos del capital mobiliario y se integran en la base imponible del ahorro en la declaración de la renta. Hasta 2015, los primeros 1.500 euros estaban exentos. Ya no. Hasta 6.000 euros se paga un tipo del 19%; sube al 21% de 6.000 a 50.000; y al 23% si la cifra es superior. Tampoco existe ya una ventaja a la hora de vender los derechos en mercado -resultado de la ampliación de capital que cotizan durante 15 días comúnmente en el mercado-, sino que tributan como una ganancia patrimonial sometida a retención.

Seis compañías del Ibex

Telefónica ha sido la sexta firma del Ibex 35 en sumarse a la moda del scrip dividend. Lo hizo este mismo año en el que ha mantenido su abono de 0,40 euros al año al que se comprometió la compañía, pero bajo la modalidad del pago en especie. El que es, hasta la fecha, el dividendo más rentable del Ibex, el de Repsol, con un 12% en la actualidad, también se abona por esta vía. A pesar del Covid-19, la petrolera quiso mantener lo prometido: 1 euro bruto en total con cargo a los resultados de 2019. Mantiene, además, un programa de recompra de acciones gracias al que amortiza, parcialmente, el aumento de capital.

ACS sigue también en esta modalidad. Con una rentabilidad del 6,7%, la constructora fundada por Florentino Pérez abonó el último de sus dos pagos el pasado 7 de julio. El próximo se espera ya en febrero de 2021 por importe de 0,45 euros.

Iberdrola es otro clásico de los programas de dividendo flexible, lo que no quita que la utility mantenga su política de incremento de la retribución al accionista cada año. En total, con cargo a 2019, distribuyó 0,40 euros que rentan un 3,6%. Es el mismo caso que Ferrovial, que lleva años retribuyendo en scrip. Su rentabilidad es del 3,15%. Almirall, la última en incorporarse al Ibex, también lleva años con la modalidad del scrip dividend para sus dos abonos anuales, y su retorno actual es del 1,8%.