El inmobiliario mira al futuro con optimismo

El sector inmobiliario arranca el 2021 con optimismo pero con cautela después de haber logrado superar un 2020 muy difícil para toda la sociedad y la economía española. Aunque el inmobiliario no ha vivido ajeno a las secuelas del Covid, es cierto que su comportamiento ha sido mucho mejor que el de otros mercados, demostrando durante estos meses su resiliencia y convirtiéndose en un segmento refugio para la inversión. De hecho, pese a la incertidumbre y a la caída de la actividad, el sector ha liderado el mercado transaccional español hasta octubre, según los datos de TTR.

El 2020 se ha cerrado con una caída de la inversión del 29,3%, hasta situarse en los 9.000 millones de euros, según los datos de BNP Paribas Real Estate. Este desplome de la inversión va en línea con el 25% que se espera de caída en Europa, según las previsiones de CBRE. A pesar de la incertidumbre generada entorno a las oficinas por el auge del teletrabajo durante la pandemia, este tipo de activos aglutinaron el grueso de la inversión, al concentrar el 26% del total, aunque en gran parte es debido a los importes registrados a inicio de año. El retail acapara la segunda posición, con el 22% de la inversión, seguido del sector logístico que se lleva el 17%.

Para este ejercicio las estimaciones son positivas. Así, desde Cushman & Wakefield se muestran optimistas sobre el recorrido que experimentará el sector en 2021 y apuntan que se verán signos de recuperación en el segmento de la inversión. Según la firma, España captará este próximo año en torno a 9.200 millones de euros de inversión en inmobiliario y los segmentos que se verán más reforzados serán la logística, oficinas y activos alternativos como residencias de estudiantes y para la tercera edad. Los hoteles y los híper y supermercados también incrementarán sus volúmenes, siguiendo la tendencia de la segunda mitad de 2020.