La inversión residencial se frena en la Costa del sol

El coronavirus pone a este mercado entre las cuerdas. Tras la crisis, se impulsará la figura del inversor en ladrillo que compra inmuebles para el alquiler con rentabilidades entre el 4-7%

La Costa del Sol estaba viviendo sus años dorados antes del Covid con más de 200 proyectos de obra nueva en marcha. Sin embargo, en estos momentos de cierre de fronteras por el confinamiento debido a la pandemia de Covid 19 y las dificultades para viajar hacen que la inversión en vivienda se haya frenado ante la ausencia del comprador extranjero. “En estos momentos la segunda residencia de la Costa del Sol ha entrado en una paralización total debido a la inexistencia de flujo turístico, con lo que se nos platean dos escenarios: uno el coyuntural, con la crisis sanitaria para nuevos inversores y el segundo, con el cliente que ya ha comprado y que está esperando poder venir a España para firmar las escrituras y vivir su casa. Es importante como resolver en esta crisis sanitaria el tema de confinamiento si vienes de fuera del país, porque no es lo mismo para el turismo residencial que para el turismo de hotel. Son dos cosas distintas y se requieren de protocolos distintos”, afirma Ignacio Peinado, director territorial de Andalucía Oriental de Neinor Homes.

Algo en lo que está totalmente de acuerdo Jesús Gil, consejero delegado de Gilmar Consulting Inmobiliario, quien asegura que después del Covid19 va a ganar protagonismo la figura del inversor en ladrillo. “Ahora el inversor extranjero está parado. No hay flujo turístico y no hay posibilidad de hacer esa visita con el cliente. En Gilmar hemos apostado por la tecnología y hacemos visitas virtuales y damos todos los servicios al cliente para facilitar las transacciones entre comprador y vendedor, pero al final el cliente tiene que venir a firmar las escrituras y ver su vivienda y estos seis primeros meses va a depender mucho de cómo evolucione la crisis sanitaria para dar confianza al cliente. Sin embargo, pensamos que esta crisis va a impulsar mucho la figura del inversor porque el ladrillo es la alternativa más segura y más rentable hoy en día para el que tenga dinero y quiera invertir en la compra y luego alquilar el inmueble con rentabilidades entre el 4 y 7%”.

Ricardo Arranz, presidente de la Federación Andaluza de Urbanizadores y Turismo Residencial y del Hotel Villa Padierna, tiene claro que la Costa del Sol es el mejor destino de Europa para tener una segunda residencia, principalmente, por la cantidad de horas de sol que hay y sus buenas infraestructuras y servicios. “El sol es nuestro mejor reclamo para el inversor extranjero, pero hay que ir más allá y tanto promotores como Administración Pública, deben de hacer ese esfuerzo para seguir atrayendo al inversor y al residente fuera de España con regulaciones fiscales. Igual que se ha quitado el impuesto de sucesiones hay que quitar el impuesto de patrimonio. Es una inversión que hace el cliente y que no se le tiene que obligar a pagar el impuesto aquí. Madrid ya lo quitó, también Portugal y Andalucía no. No podemos ahuyentar al inversor. Hoy en día muchos se van a Portugal porque han ido más rápido que nosotros en el tema fiscal y es algo muy importante porque el cliente quiere tener seguridad física y jurídica. En estos momentos cualquier cliente extranjero que compre una vivienda de más de 500.000 euros en Portugal, tiene la tarjeta de residente en Portugal con la Golden Visa en diez días y aquí en España, puede tardar años”

Los expertos creen que los proyectos que ya estén en obras no se verán afectados porque ya están hechas las preventas. Pero hay más dudas sobre los que hayan empezado a comercializar ahora y, sobre todo, los que tengan suelo y tengan que lanzar el proyecto. “En Neinor Homes, los proyectos existentes ya en construcción tienen un nivel de preventas mínimo del 30-40%, estando la media con coberturas más altas que alcanzarían el 70%. En cuanto a las reservas hechas, de momento no hay una avalancha de cancelaciones, pero es verdad que todo el mundo está esperando a ver restablecerse los flujos turísticos. Hacer nuevas ventas es difícil al no poder entrar los extranjeros en España para formalizar la compra por lo que pensamos que habrá una bolsa de demanda embalsada y cuando los extranjeros puedan venir a España y la situación de crisis esté controlada, la demanda volverá, aunque pensamos que será en 2021. Los nuevos proyectos son los que podrían quedarse en stand by y saldrán adelante los proyectos de mejor calidad”, apunta Ignacio Peinado.

Algo en lo que también incide Ricardo Arranz, “tenemos que ir más a la calidad que a la cantidad. Hace falta que las grandes marcas aterricen en la Costa del Sol porque el cliente extranjero no solo busca una vivienda sino también servicios, lo que se llama private residences, villas que también ofrecen servicios de campo de golf, hoteles, etc., un modelo que ya se explota en Florida y California y que tiene que consolidarse en España porque el cliente busca calidad y seguridad”.

En cuanto a los precios, si el mercado residencial se va a ralentizar es lógico que los precios se ajusten, asegura Jesús Gil. “Los precios se van a ajustar porque antes era el vendedor el que llevaba la voz cantante en este mercado, pero ahora es el comprador”.

A pesar de que la situación actual del mercado de segunda residencia en la Costa del Sol es compleja por la crisis sanitaria que vivimos, los expertos apuntan que se volverá a la situación pre-covid en cuanto se pueda porque es un mercado excepcional para el inversor extranjero. “Si no hay otro rebrote del virus en la población pasaremos estos meses de incertidumbre, pero recuperaremos el ritmo en 2021” asegura Ignacio Peinado.

Sin embargo, Ricardo Arranz no es tan optimista. “Sólo cuando haya un fármaco y una vacuna que nos de seguridad se va a reactivar el mercado y hasta entonces estaremos en una situación de inseguridad continua y en esta situación nadie va a hacer una inversión en una segunda residencia, con precios elevados en algunos casos, que hay que pensarlo dos veces. Pero quiero ser optimista y espero que estemos cerca de encontrar ya una vacuna que nos de esa seguridad para retomar la actividad”.

En la Costa del Sol predomina el cliente internacional -más del 60%- y de origen diversificado. Aunque los británicos siguen liderando, destacan los clientes de Suecia, Bélgica, Alemania y Francia. Es un destino que cubre los deseos y necesidades de estos clientes, que buscan buen clima, playa, campos de golf, buenas infraestructuras y servicios.