La salud mental, un problema para el 72% de emprendedores

Los emprendedores tienen 2 veces más probabilidades de suicidarse. De todos los fundadores con problemas, el 63% tenía ‘burnout’, el 59% ansiedad y el 47% depresión.

La salud mental comienza a ser un tema del que se está comenzando a hablar en la vida privada de los ciudadanos. Sin embargo, aún conserva muchos tabúes, especialmente entre ciertos sectores de la población, así como en entornos profesionales. Este es el caso del ecosistema emprendedor, que sufre unos ratios de afecciones mentales altísimas ya que se ve sometido a una continua presión e incertidumbre, miedo al fracaso, comparación constante, y una vinculación extrema entre el individuo y su empresa.

“Al emprendedor se le exige estar siempre fuerte, sereno, con una sonrisa... Y disponible. Lo contrario muestra debilidad y eso no casa con su figura, dentro y fuera de la empresa. A menudo, se le presenta como un héroe invencible, una rockstar. Pero tu startup no eres tú y la realidad detrás “del personaje” del que se es esclavo puede ser completamente diferente si uno no es consciente de los estragos que emprender puede generar en la persona, a veces de forma silenciosa” manifiesta Alejandro Artacho, CEO y fundador de la startup Spotahome.

Precariedad en salud mental

Concretamente, según un estudio de la Universidad de Berkeley, el 72% de los emprendedores sufren problemas de salud mental. Además, el estudio revela que tienen 2 veces más probabilidades de suicidarse y poco han trascendido al terreno público los casos que se han dado. Como por ejemplo el caso de Aaron Waltz, que afectó mucho al sector. Desde entonces, otros emprendedores con perfiles altos se han quitado la vida (o se ha sospechado que así fuera), como el fundador de Unfiltered Jake Millar; el pionero de software antivirus John McAfee; el fundador de Zappos Tony Hsieh; el Chef Anthony Bourdain; la diseñadora Kate Space, etc.

Otro estudio de EEUU publicado en Hubspot menciona que, de todos los fundadores con problemas mentales, el 63% sufría de burnout, el 59% padecía de ansiedad, el 47% depresión, el 24% déficits de atención, el 14% abusa de sustancias y el 3% son bipolares. Además, 8 de cada 10 mencionan que existe un estigma en la sociedad alrededor de la salud mental y el 70% que no hay demasiados recursos de ayuda para temas mentales.

“Para mí, el 2019 fue el año más estresante de mi vida: cientos de contrataciones, aperturas de nuevas oficinas, presión por doblar facturación mejorando márgenes, vuelos casi diarios, trabajar festivos, etc. Un ritmo frenético con un tremendo impacto en mi salud física y mental. Y, de repente, el Covid”, narra el fundador de Spotahome. “En marzo de 2020 se nos cae toda la facturación a 0€, además de tener que devolver cientos de miles de euros en cancelaciones. Caí en una depresión profunda. Después de 7 años sacrificando todo por la empresa (familia, amigos, pareja etc.), todo se fue a pique por algo que ni siquiera controlaba”, concluye.

Sin embargo, tras el momento más oscuro, Artacho indica que halló la luz en el desarrollo personal y el autocuidado, gracias a priorizar y hacerse cargo de su salud mental. Así, con el objetivo de visibilizar y ayudar a otros, creó junto a otros emprendedores Ancla.life. Además, gracias a estos cambios, Spotahome no solo recuperó, sino que en la actualidad, está más fuerte que nunca y con buena proyección futura.