Industria 4.0: las pymes industriales españolas quieren seguir creciendo

El mundo postpandémico ha acelerado para personas y empresas cambios relevantes imposibles de ignorar. Ya antes del Covid-19, se insistía en la urgencia de abordar el camino hacia la transformación digital en la pyme y en especial, en el sector industrial como pieza clave en la competitividad de la economía y la creación de empleo. Por ello, la Cámara de Comercio de España, uno de los principales agentes de impulso al proceso de transformación digital de las pequeñas y medianas empresas, puso en marcha en 2020 el programa Industria 4.0. Cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER), dependiendo de la comunidad autónoma, el programa financia hasta un 85% de los primeros 20.000 euros del coste total del plan de desarrollo tecnológico de la pyme.

Como explica José Luis Bonet, presidente de la Cámara de Comercio de España, “la Revolución Tecnológica ha impactado a todos los sectores, pero es en la Industria donde ha provocado una disrupción mayor. Las tecnologías de la información y las comunicaciones permiten a las pymes resolver problemas y crear oportunidades. No solo incrementan la competitividad de las pequeñas y medianas empresas, sino que repercuten en el fortalecimiento de la economía de todo nuestro país”.

Se trata, en definitiva, de dar otro salto tecnológico en un sector esencial de la economía, con un peso en 2021 del 15,3% sobre el PIB, responsable de 2 de cada 3 exportaciones y caracterizado, como sostienen los trabajos de la Comisión de Industria de Cámara de España, por su capacidad para generar empleo de calidad.

“El Programa de Industria 4.0 se orienta hacia las necesidades específicas de las empresas, mediante el desarrollo de una metodología mixta de diagnóstico, apoyo en el proceso de implantación de soluciones y difusión del conocimiento. El objetivo fundamental es apoyar a pymes y micropymes con acciones de sensibilización, ayudas y asesoramiento para aumentar su eficiencia y productividad de manera sostenible”, destaca Julián López-Arenas, director de Competitividad de la Cámara de Comercio de España y recuerda que el 66% del tejido industrial español lo integran pymes.

Con la participación de las Cámaras de Comercio de Andalucía, Castilla-La Mancha, Castilla y León, Cataluña, Comunidad Valenciana y Galicia, desde su puesta en marcha en 2020, ya han participado 234 empresas. El Programa consta de dos fases. La primera consiste en un análisis exhaustivo, especializado y gratuito del grado de adopción tecnológica por parte de la pyme industrial.

Una vez realizado el diagnóstico, las empresas que se encuentren interesadas en avanzar en el proceso, inician una segunda fase en la que pueden llevar a cabo las soluciones recomendadas bajo las siguientes líneas básicas de actuación:

- Aplicaciones de gestión intraempresa / interempresas: soluciones de negocio, soluciones de inteligencia (Big Data y Analytics) y control, plataformas colaborativas.

- Comunicaciones y tratamiento de datos: computación y cloud, conectividad y movilidad.

- Hibridación mundo físico y digital: fabricación aditiva (escáner e impresión 3D), robótica avanzada, sensores y sistemas embebidos (IoT, VR/AR, simulación)

· Sistemas de gestión de la producción; de infraestructura en planta productiva; de optimización de procesos de la producción; de gestión logística y de ingeniería de producto.

Después de identificar las soluciones y acciones adaptadas a las necesidades de la pyme, son proveedores externos a las cámaras los que realizan la implantación de las soluciones, todas muy orientadas a la industria: sistemas de gestión de la producción, soluciones de infraestructura en planta productiva, sistemas de optimización de procesos de la producción, gestión de logística e ingeniería de producto.

El ejemplo de Natur Crunch

El programa Industria 4.0 persigue que las pymes mejoren su productividad y su capacidad innovadora, además de ayudarlas en la gestión de procesos, el ahorro de costes, el posicionamiento de la marca, la reducción de cargas, el aumento de ingresos y el ahorro de tiempo. “El impacto ha sido muy positivo, mejorando la integrabilidad de todo el soporte software implicado en la gestión de información de la empresa a todos los niveles (producción, contabilidad, ventas, aprovisionamientos, etc.), lo cual termina traduciéndose en mayor eficiencia competitiva. La coordinación con el proveedor ha sido fluida y el asesoramiento de la Cámara de Almería ha sido impecable y cercano en todo momento”, explica el CEO de Natural Crunch, Antonio Ramírez, una compañía almeriense que comercializa snacks de vegetales deshidratados crujientes. El Doctor Ramírez optó por implantar en su compañía la modalidad de cloud computing de una solución ERP (Enterprise Resource Planning) acorde a las necesidades específicas de la empresa. Pretendía así mejorar los procesos internos, gestionándolos de forma integral y eliminando la duplicidad de información. “Al ser aplicaciones modulares, son escalables y se adaptan a las necesidades de la empresa en todas las etapas de su crecimiento”, asegura.