‘Fintech’: herramienta imprescindible para el crecimiento de las pymes

Las pequeñas y medianas empresas se encuentran en un contexto complicado para el correcto desarrollo de su actividad y la ayuda de las financieras tecnológicas puede ser un factor diferencial para salir del pozo de la falta de financiación, ayudas y los sobrecostes provocados por la inflación.

Las fintech surgen de la unión de dos palabras, Finance y Technology, y el término aglutina a todas las empresas de servicios financieros que utilizan la última tecnología para ofrecer productos y servicios financieros innovadores. Las fintech han llegado para cambiar todo el sistema financiero tradicional, tanto para empresas como para particulares. Las compañías que se sitúan bajo el paraguas de las fintech se dedican a intermediar en el mundo de las finanzas: desde transferencias de dinero, préstamos, compras y ventas de títulos, asesoramiento financiero y de inversiones, etc.

En la actualidad, su papel de apoyo a la pequeña y mediana empresa cobra mucha importancia a raíz de las dificultades de financiación. La subida de tipos de interés provoca que las pymes busquen soluciones fuera de las entidades bancarias clásicas. Del mismo modo, una de las medidas estrella del Gobierno junto al Kit Digital, la Ley Crea y Crece, prometía favorecer la creación y el crecimiento empresarial de las pymes. Pero, para la Confederación Española de la Pequeña y Mediana Empresa (Cepyme), esta norma provoca todo lo contrario a los motivos por los que fue concebida, aumentando la burocracia para solicitar subvenciones o fondos europeos. De esta forma, estas empresas deberán auditarse para comprobar que tienen sus cuentas en orden; en caso contrario, estas no podrán acceder a ningún tipo de ayuda estatal.

La primera muestra de esta ley se traduce en las nuevas deducciones fiscales a empresas que han generado gran polvareda por su escaso alcance ya que, de acuerdo con los datos proporcionados por Hacienda, solo 407.384 empresas se beneficiarán de la rebaja del tipo nominal del Impuesto sobre Sociedades del 25% al 23%, cuando 1,5 millones de pymes están sometidas a este impuesto. En otras palabras, solo el 25% de las pymes podrán beneficiarse de las medidas y esto, en buena parte, es consecuencia de la difícil situación que atraviesan muchas de estas.

En 2019, según datos de la Agencia Tributaria (Aeat), 1.483.524 empresas declararon una cifra de negocio igual o inferior a un millón de euros, pero de estas, solo 460.448 contabilizaron una base imponible positiva y, de acuerdo con los datos del Gobierno, en la actualidad la situación se ha visto agravada ya que solo 407.384 estarían en esta supuesto. En lo referente al Impuesto sobre Sociedades, fuentes de Cepyme, confirma a elEconomista.es que “el alivio fiscal llega a un número muy limitado de pymes y no está enfocado en las que atraviesan mayores dificultades ya que éstas generan bases imponibles negativas o positivas de escasa cuantía”.

Costes y tipos de interés disparados

Y es que el tejido empresarial español continúa sufriendo los efectos de la inflación. En el caso de las pymes, los costes totales que soportan para ejercer su actividad se han disparado un 24,4% interanual entre abril y junio, según el último Indicador Cepyme sobre la situación de la Pyme en España para el segundo trimestre.

El empeoramiento de las condiciones de crédito tras las dos últimas subidas de los tipos de interés, de 0,75 puntos en septiembre y de 0,5 puntos en julio, harán todavía más vulnerable la situación de las pymes en los próximos meses, sobre todo si se tiene en cuenta que el Banco Central Europeo ya ha anunciado que las subidas de tipos proseguirán en los próximos meses para tratar de frenar la inflación. Es en este contexto donde la fintech debe ser el mayor aliado de la pequeña y mediana empresa española.

Desde elEconomista.es hemos hablado con Arturo González Mac Dowell, presidente de la Asociación Española de la Fintech e Insurtech (AEFI), que nos cuenta que “si pensamos en lo que necesita una pyme para despegar, lo primero que nos viene a la mente es capital a través de empresas que se dedican a equity crowdfunding. Estas son capaces de reunir recursos para mejorar y crecer; por ejemplo, empresas como Glovo o Alvalle levantaron su primera ronda gracias a un proyecto en una plataforma de crowdfunding. Además, si el modelo de negocio es B2C, los pagos siempre serán un tema recurrente y principal, por lo que las empresas del sector PayTech serán útiles, necesarias y seguras para articular los pagos de las compañías, ya no solo los que provengan de los clientes, sino también a sus proveedores que, armados con buenos programas de gestión y cumplimiento, forman un equipo perfecto para asegurar la transparencia en la contabilidad, facturación, pagos y cobros de la empresa”.

Por su parte, Julián Villalba, MD Finsurtech de Trinios, nos dice que “un enfoque fintech permite incorporar avances tecnológicos en analítica de datos, inteligencia artificial y machine learning en beneficio de las finanzas de la pyme. Se traduce en una mejor toma de decisiones para anticiparse al mercado e identificar oportunidades, prever impagos, racionalizar gastos o disponer de vías alternativas de financiación. También ayuda a apostar por una reconversión del modelo de negocio o realizar movimientos estratégicos, como una salida al parqué cuando llegue el momento adecuado para maximizar esa fuente de capital y proyección. En definitiva, permite un uso más inteligente y eficiente de los recursos de la empresa, lo cual es diferencial para reducir la brecha que las pymes han tenido tradicionalmente a la hora de competir con grandes compañías y multinacionales que disponen de una mayor capacidad de recursos”.