Las ‘startups’ de Foodtech triplican su inversión anual

España es el quinto ecosistema Foodtech con mayor inversión en territorio europeo y tiene una facturación de 695 millones de euros al año. Más de 400 ‘startups’ españolas trabajan para el desarrollo tecnológico alimentario.

El sector hostelero se ha visto evocado a una evolución forzada donde la creatividad y la innovación de la mano de las nuevas tecnologías facilitan la reconversión de la restauración. Según el informe Foodtech in Spain: Moving the Spanish Food System Forward impulsado por ICEX, el sector se consolida como el motor de la industria alimentaria. Así lo demuestran los datos recogidos, donde se evidencia un crecimiento del 220% entre 2020 y 2021; y un importe de 695 millones de euros, que triplica la cifra invertida el año 2020.

El auge en este campo se debe en gran parte a las empresas emergentes de delivery, que junto a las inversiones en proteínas alternativas y digitalización de la agricultura han facilitado este desarrollo. Gracias a esto, España es el quinto ecosistema Foodtech con mayor inversión en territorio europeo, por detrás de Alemania, Reino Unido, Francia y los Países Bajos. Nuestro país cuenta con 400 startups que trabajan en el desarrollo de la cadena agroalimentaria y sus aplicaciones futuras.

El sector Foodtech busca facilitar los procesos y resultados en materia alimentaria gracias a la aplicación de las tecnologías, las cuales permiten a su vez ir fortaleciendo el sector y darle un nuevo giro a los resultados que pueden dar. “Los grandes referentes del sector hostelero, aquellos reconocidos por sus creaciones, son ejemplos de constante innovación y aplicación de las nuevas tendencias en el mercado”, revela Last.app.

Innovar para impresionar

Que la cocina sea creativa o innovadora hace referencia a una nueva creación que ha sido puesta en la economía buscando el espectáculo, un impacto en el comensal que despierte los sentidos y le transporte a experiencias anteriores disfrutando de la experiencia del manjar que se le ofrece. Con el ojo puesto en este objetivo, los establecimientos gastronómicos recurren a nuevas tecnologías y técnicas como la esferificación, la deconstrucción, vaporización o instrumentos como los sifones o gascto o servicio requerido.