Emprender con una franquicia inmobiliaria en tiempos de crisis

Una de las ventajas en estos tiempos es que estar bajo el paraguas de una marca reduce la incertidumbre, además de otros aspectos como el soporte, los servicios, la formación o las herramientas disponibles, también las más innovadoras

La pandemia de Covid-19 está teniendo un impacto de gran alcance en la situación económica mundial y el sector de la intermediación inmobiliaria no es ajeno a ello. “Si bien, estamos ante un momento de incertidumbre, éste es aún un escenario positivo para emprender en el ámbito inmobiliario, pues se trata de una situación en la que compradores y vendedores necesitan en mayor medida los servicios de un profesional inmobiliario”, explican desde Remax España, compañía internacional de referencia en el sector.

Desde la compañía, con 25 años de experiencia en el sector, analizan la viabilidad de emprender en el negocio inmobiliario en estos momentos, tanto de manera independiente como dentro del sistema de franquicias, teniendo en cuenta los riesgos, los costes y los beneficios.

Menor incertidumbre

Una de las ventajas de iniciarse en el sector de la intermediación inmobiliaria mediante una franquicia en momentos de incertidumbre como este, es sin lugar a duda la posibilidad de hacerlo mediante un modelo de negocio ya constatado y probado; que permite emprender bajo una gran seguridad evitando la dispersión y la falta de foco. “Lógicamente, este aspecto supone una disminución de riesgo empresarial al contar ya con esta orientación; algo que aún es más valorado en tiempos de pandemia”, explican desde Remax.

De la misma forma, una de las grandes posibilidades que brinda una franquicia inmobiliaria es el reconocimiento de marca. “Y es que, desde que una persona cuelga un rótulo en su oficina con el logo y nombre de una marca reconocida, automáticamente el público lo conoce y lo relaciona con una forma de trabajar y operar en el sector inmobiliario; desde sus inicios, sin necesidad de tener que trabajarse ese posicionamiento y conocimiento sobre su profesionalidad”, aseguran desde la marca. “Un arduo trabajo aún más complicado en momentos de crisis”, concluyen.

Otro de los factores que permiten las franquicias inmobiliarias, aunque parezca contradictorio, es la independencia. “Si bien, esta independencia para trabajar no está reñida con el soporte y asesoramiento que siempre ha de brindar el master franquicia, vitales por otra parte en la actualidad”, destacan.

Junto con el modelo de negocio, el soporte, los servicios, la formación y las herramientas que ofrece una franquicia inmobiliaria son de los aspectos más y mejor valorados por los franquiciados. Además de suponer una menor inversión en ellos, pues forman parte del sistema de trabajo de la franquicia, estos son muy innovadores, y ofrecen en la mayoría formación sobre las mismas y facilitan enormemente el día a día de los franquiciados. Herramientas de marketing, de gestión, bases de datos y tecnología y formación son los principales recursos que ofrecen las franquicias inmobiliarias.

Además, éstos ya han sido testados previamente por el franquiciador, reduciendo la necesaria acción de prueba/error que debería asumir cualquier gestor de una oficina inmobiliaria con sus consecuentes gastos económicos y desperdicio de tiempo.

“Tampoco podemos obviar el trabajo en red y en colaboración; aumentando así las posibilidades de éxito de agentes y clientes en sus transacciones”, apuntan desde Remax.

Desventajas

No obstante, no se pueden omitir otra serie de puntos relativamente negativos de asociarse a una franquicia inmobiliaria. Así, la inversión previa siempre es mayor, el franquiciado ha de asumir el pago de una licencia o un fee mensual. Además, si el dueño de la agencia inmobiliaria decide dejar la franquicia, la marca nunca se la puede llevar consigo, destacan desde Remax.

Evidentemente, también se renuncia a un cierto nivel de independencia; no obstante, es importante analizar los beneficios que supone emprender con una franquicia inmobiliaria frente a esta renuncia y la multitud de recursos que prestan.

Y finalmente, no podemos obviar que, si el franquiciado cuenta con grandes profesionales también franquiciados en su zona, sin duda este éxito también le va a catapultar; aunque puede pasar lo contrario; asumir esa mala imagen.

Si bien es cierto que las franquicias cuentan con importantes protocolos para expulsar a estas personas de su red evitando cualquier daño en la imagen de los franquiciados de la zona.