Preocuparnos no sirve de nada, ocuparnos lo puede cambiar todo

Nos encontramos ante un nuevo estado de alarma declarado en España a causa de la pandemia del coronavirus, que se prolongará hasta el 9 de mayo de 2021. A pesar de que tiene características muy distintas al que vivimos a mediados de marzo, esta situación ha provocado gran incertidumbre sobre el futuro del trabajo de los ciudadanos. La seguridad laboral proporciona confianza y ayuda a mejorar el rendimiento de los trabajadores, pero desde hace un tiempo vemos cómo se tambalea debido a las medidas aprobadas por el Gobierno para hacer frente a esta crisis sanitaria. Ante la incertidumbre, ¿dónde ponemos el foco en el ámbito laboral?

La clave es tener alguna herramienta que nos permita gestionar las preocupaciones y problemas diarios de un modo inteligente y práctico, desarrollando una actitud positiva inteligente. Lo más importante para saber dónde poner el foco en el ámbito laboral, es invertir tu tiempo, atención y energía en tu zona de influencia, que es allí donde sí puedes hacer algo. Tenemos una gran incertidumbre sobre qué ocurrirá en unos meses en nuestro entorno y en nuestro trabajo.

A nivel psicológico, la incertidumbre puede causar estrés y ansiedad en los trabajadores, que a su vez puede provocar bajo rendimiento. Lo que va a favorecer nuestro bienestar laboral es poner el foco en aquello que sí podemos hacer ante esta situación, sin intentar abarcar todo lo que nos preocupa porque sería imposible. Por este motivo, es de vital importancia saber cuál es tu zona de influencia, y para ello basta con hacerte la siguiente pregunta ante cualquier preocupación: ¿Qué puedo hacer yo?

Tenemos dos opciones, si no hay nada que podamos hacer ante un contratiempo es fundamental que lo aceptemos de manera que pueda suponer para nosotros una nueva oportunidad de aprendizaje. Pero si ese contratiempo está dentro de nuestra zona de influencia y podemos hacer algo al respecto, entonces sí conviene invertir toda nuestra energía para mejorar esa situación. Es ahí dónde debemos poner el foco en el ámbito laboral, en aquellas preocupaciones que podemos solucionar, están a nuestro alcance y nos corresponden, es decir, en nuestra zona de influencia. Haz lo que puedas, con lo que tengas, donde estés.