La Comunidad de Madrid insiste en revisar el mecanismo del tope gasístico
La consejera de Medio Ambiente defiende el modelo madrileño de eficiencia y afirma que las decisiones estrictamente políticas nos han hecho dependientes del gas.
La consejera de Medio Ambiente, Vivienda y Cultura de la Comunidad de Madrid, Paloma Martín, clausuró el VII Foro de Energía Repower EU: El camino hacia la independencia energética, organizado por elEconomista.es, en el que reiteró al Gobierno la petición de que revise el tope de gas “que pagan los consumidores”.
La consejera tomó como ejemplo el modelo de Madrid, basado en la eficiencia energética, complementada con el menor impacto posible sobre el crecimiento económico y el empleo.
Entre sus objetivos, el camino “hacia una energía limpia, barata, segura, estable y descarbonizada”, declaró en su discurso la representante de Medio Ambiente de la CAM.
En la región, afirmó, han invertido 148 millones de euros para ahorrar 25.895 toneladas equivalentes de petróleo (tep) y una reducción de las emisiones de CO2 de 82.622 toneladas. Asimismo, destacó, se encuentran tramitando la concesión de 160 millones de euros de fondos europeos para rehabilitar barrios, edificios y garantizar la eficiencia energética.
Martín aprovechó para hacer un repaso de la actual crisis energética. A este respecto, destacó la energía como “un recurso estratégico de cuyo acceso y control dependen la estabilidad, el crecimiento, el bienestar, la independencia y la paz de las naciones”.
Asimismo, consideró necesario que se lleve a cabo un análisis pausado y “sin filtros ideológicos” para buscar soluciones eficaces. En España, a diferencia de Europa, “el problema es de precio, debido a un diseño ineficiente y caro, y a una gestión ineficaz”, afirmó Martín.
La consejera de la región madrileña defendió que las decisiones políticas hayan convertido a España en un país dependiente del gas “que no tenemos” como vector energético.
Bajo el Gobierno del PP, recordó, España “supo sacar provecho de la principal ventaja de la que goza nuestro país en materia energética: su posición geográfica”. Sin embargo, criticó que ahora se dé la espalda a las centrales nucleares como respaldo del gas.
Paloma Martín instó al Gobierno a corregir las “debilidades” y “dependencias” del país: el adiós de las nucleares, del carbón o la prohibición de la explotación de recursos minerales que dejan a España como país dependiente de un gas “del que carecemos” y que se antoja como un problema enorme, ya actualmente, ante la escalada de precios, y que además supone una “señal de alarma sobre lo que está por venir en el futuro inmediato”.
Finalmente, la consejera de Medio Ambiente, pidió replantear el funcionamiento del tope del gas porque aumenta las facturas, así como reorientar la política exterior “errática” que priva a España de una mayor diversidad de fuentes energéticas, donde además tiene que reconstruir relaciones con Argelia, un socio fundamental de esta materia prima.