Redes y Electricidad 4.0: hacia el objetivo cero neto
El cambio climático es un reto energético, puesto que más del 80% de las emisiones mundiales de CO2 emitidas a la atmósfera se deben principalmente a la producción y al consumo de energía.
Estamos a tiempo de limitar el calentamiento global a 1,5ºC, pero sOlo si conseguimos eliminar 10Gt de CO2 de las emisiones que emitimos al año, hasta 2030. Esta cantidad supone el triple de las emisiones anuales de los países de la UE-27. Así que ¿cómo conseguir los objetivos climáticos? Acelerando la Electricidad 4.0, la convergencia de la Electrificación y la Digitalización, puesto que la mayoría de emisiones contaminantes están relacionadas con la producción y consumo de energía.
Electricidad 4.0 en las Redes
Está demostrado que la electricidad es de 3 a 5 veces más eficiente para su uso que otras formas de energía y también es el mejor vector para la descarbonización. En este sentido, necesitamos pasar del 31% de energía solar y eólica actual al 54% en los 2030..., y se espera que la electricidad duplique su participación en el mix energético final en 2050.
En segundo lugar, la digitalización convierte lo invisible en visible. Los sensores inteligentes y conectados aportan datos, y estos a su vez se analizan a través de sistemas y softwares, que aportan información de valor. Con esta información, las redes pueden tomar decisiones para ser más eficientes y reducir pérdidas energéticas.
Estrategias digitales
Para abarcar el complejo panorama futuro
-generación distribuida, vehículo eléctrico, etc.-, las redes deberán enfocarse en dos estrategias tecnológicas: la continuidad digital y la gestión en remoto.
Una red interoperable y enfocada en los datos proporciona gemelos digitales de los activos de la red e integra los diferentes softwares de sistemas, aportando la continuidad digital necesaria y facilitando acciones fluidas y continuas en todo el ciclo de vida de la red, desde la especificación y el diseño, hasta la instalación, la supervisión, la optimización y el mantenimiento.
Por otro lado, cada vez más las compañías eléctricas han ido adoptando soluciones que permitan controlar, gestionar y operar sus instalaciones en remoto. Una de estas soluciones es un Centro de Operaciones Remoto Unificado, una solución de visualización que permite crear centros de operaciones inteligentes, en el que convergen las tecnologías de operaciones (OT), las tecnologías de la información (IT) y las tecnologías de ingeniería (ET).
En conclusión, las redes son el núcleo de la transición energética, y su velocidad de transformación marcará el ritmo. Una velocidad indispensable, actualmente, para frenar el calentamiento global. La buena noticia es que ya contamos con la tecnología: la clave será la Electricidad 4.0.