El futuro de la eficiencia energética son la digitalización y los datos

Vivimos en un mundo en constante cambio que necesita energía para seguir en movimiento pase lo que pase. Y es que nos encontramos ante un contexto en el que se ha incrementado el coste de la energía -petróleo, gas y electricidad-, lo que ha provocado que las empresas tengan que asumir importantes costes energéticos adicionales; y se espera que los precios aumenten.

Si nos fijamos en datos concretos, el precio de la luz costaba hace un año 99,76 euros el MWh, hace unos meses alcanzaba un precio de 122,63 euros/MWh y, en los últimos días, ha marcado 182,93 euros/MWh, según el Operador del Mercado Ibérico de la Electricidad (OMIE). Esto significa que, prácticamente, el coste energético se ha duplicado en comparación con el mismo periodo de 2021 y ha llegado a costar alrededor de 23 euros más que a principios de año.

Según la Administración de Información Energética de EEUU (EIA, por sus siglas en inglés), para 2050 se prevé que el uso de la energía en el mundo aumente casi un 50% con respecto a 2020. Esto incluye también un aumento del consumo de energía en el sector industrial.

Así, el incremento de los precios de la electricidad y del gas está provocando que algunas empresas deban paralizar su producción por el aumento significativo de la factura energética. Sin embargo, la parada de ciertas infraestructuras puede resultar crítica para el desarrollo de la economía y sociedad, ya que puede afectar a la cadena de suministro y el transporte y, con ello, que se produzca una nueva escasez de materias primas y productos esenciales.

Como consecuencia, empresas y gobiernos de todo el mundo están buscando formas de lograr y facilitar un crecimiento sostenible, por lo que las nuevas normativas obligan a mejorar la eficiencia energética y a reducir las emisiones.

Una de las formas más prometedoras de alcanzar estos objetivos es mediante la adopción de tecnologías de eficiencia energética, que contribuye a la reducción del consumo de energía, beneficiando a las empresas en términos de rentabilidad y sostenibilidad.

Según un estudio reciente realizado por ABB, empresa líder global de ingeniería, de la mano de la consultora internacional Sapio Research, la eficiencia energética es una clara prioridad para ejecutivos de todo el mundo.

Una tendencia que también se refleja en nuestro país, donde el 89% de los líderes industriales encuestados afirmó que aumentará la inversión en la eficiencia energética de sus operaciones en los próximos cinco años y el 54% tiene como objetivo lograr las cero emisiones netas en ese plazo.

En la actualidad, más de la mitad de la electricidad del mundo la consumen sistemas de motores eléctricos, iluminación, aparatos de aire acondicionado y frigoríficos domésticos.

De acuerdo con otro informe publicado por la compañía, en el sector industrial cerca del 70% de la electricidad que se consume la utilizan motores eléctricos y hay en funcionamiento más de 300 millones de sistemas industriales accionados por motores.

Por lo tanto, la mejora de la eficiencia de los sistemas de motores eléctricos puede ser importante para ayudar al mundo a reducir las emisiones de CO2 para conseguir el objetivo de cero emisiones netas y reducir los residuos.

Las medidas necesarias para lograrlo son prácticas, realistas y eficaces, y también pueden reducir los costes energéticos para la industria. De hecho, la Agencia Internacional de la Energía revela que, si los 300 millones de sistemas de motores que existen se sustituyeran por equipos de mayor eficiencia, podríamos reducir el consumo mundial de electricidad hasta en un 10%.

De este modo, las soluciones de eficiencia energética conectadas digitalmente son esenciales para acelerar el progreso y se deben aprovechar las oportunidades que presentan la digitalización y el Internet de las cosas (IoT) del sector industrial, así como los datos, los conocimientos y la experiencia, para conseguir operaciones con mayor eficiencia energética.

Concretamente, gracias al IoT y a la digitalización, ahora hay nuevos tipos de servicios digitales que ofrecen aún más oportunidades para reducir el consumo de energía.

Estos servicios utilizan soluciones digitales conectadas para proporcionar nuevos datos sobre el uso de la energía que, combinados con la experiencia, permiten tomar mejores decisiones sobre la eficiencia energética. Con las conexiones y servicios remotos, se puede comprobar en cualquier momento y desde cualquier lugar el estado de los equipos e incluso de procesos completos.

Casi el 96% de los responsables de la toma de decisiones de empresas internacionales y líderes tecnológicos creen que la digitalización es esencial para la sostenibilidad, y el 38% de las empresas con madurez digital han experimentado un aumento de sus ingresos gracias a las prácticas de sostenibilidad. Sin embargo, solo el 35% de las empresas han implantado soluciones de IoT industrial a escala, lo que pone de manifiesto el potencial que tiene la industria para avanzar hacia objetivos en materia de sostenibilidad aumentando la digitalización.

Se evidencia, así, que a medida que la digitalización siga avanzando, los servicios basados en datos ayudarán a las empresas a lograr sus objetivos de eficiencia energética y los modelos comerciales basados en los resultados se harán más comunes.