El 20% del PIB industrial espera el nuevo marco de cogeneración
Durante meses, y reiteradamente, los cogeneradores venimos denunciando los retrasos en la publicación de nuestras retribuciones -llevan ya dos años sin actualizarse-, algo que, sumado a la brutal subida de los combustibles, asfixia financieramente a las empresas. Esta dejadez regulatoria hacia el sector incumple el marco legal y genera una incertidumbre que tiene ya su reflejo en la preocupante caída del 20,4% en la producción de las plantas cogeneradoras a cierre de abril, frente al mismo mes del 2021; un alarmante descenso que se produce tras la publicación del RDL 6/2022 de medidas de urgencia, de 30 de marzo.
El desplome de la cogeneración es grave y adelanta y anuncia una caída industrial, ya que el 20% del PIB industrial del país se fabrica con esta energía, que supone el 11% de la generación de electricidad nacional y que utiliza el 20% del consumo total de gas en España.
La cogeneración es la tecnología más eficiente, clave y, en muchos casos, insustituible o con alternativas menos eficientes y competitivas en sectores calorintensivos como el alimentario, papelero, químico, cerámico, refino o textil, que exportan la mitad de lo que producen, siendo fundamentales para la economía nacional y manteniendo más 200.000 empleos directos,
El sector venía funcionando con las previsiones de retribución del marco en vigor. Sin embargo, el 30 de marzo, el RDL 6/2022 introdujo cambios relevantes de aplicación retroactiva con vigencia desde el 1 de enero, que dejaron la retribución en total incertidumbre hasta que se publiquen, no antes del 31 de mayo, los desarrollos del RDL 6/2022, lo que está obligando a las cogeneraciones a funcionar a ciegas.
Esta evidente situación de inseguridad e incertidumbre conlleva el riesgo de producir en pérdidas y muchas cogeneraciones se ven obligadas a ir parando su actividad, mientras que otras deben mantenerla obligatoriamente para atender a las necesidades de sus industrias asociadas, acumulando así gravísimos riesgos. Nuestros industriales se ven en un limbo regulatorio que está impidiendo que la cogeneración pueda gestionar la alta volatilidad de los precios de los combustibles y de la electricidad.
Desde ACOGEN hemos colaborado, y seguimos colaborando, con el Ministerio para solucionar lo antes posible esta situación. Por ello, urgimos al MITECO a acabar con esta incertidumbre restableciendo lo antes posible la normalidad regulatoria. Es evidente que la Administración debe solucionar las retribuciones y dotar al sector de un marco estable en el que las cogeneraciones puedan operar y abordar las subastas que -como confirmaron la vicepresidenta y ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, y la ministra de Industria, Reyes Maroto-, se celebrarán este año, movilizando más de 800 millones de euros de inversión en cientos de industrias.
La cogeneración española lleva dos años esperando el nuevo marco. Las industrias están inmersas en una crisis energética con convulsiones en los mercados y desajustes en la metodología de una retribución desfasada, el RDL 6/2022 supone dos negativas y graves consecuencias. La primera, la retroactividad de los ajustes desde el 1 de enero, una mala praxis jurídica de tiempos pasados que ya desencadenó grandes males para el sector y que deja en papel mojado la confianza legítima con la que la cogeneración viene operando este primer trimestre. La segunda, relacionada con la anterior, es el plazo de dos meses (antes del 31 de mayo) para establecer las retribuciones de 2022, que supone que las plantas han operado tres meses en un marco anterior que se elimina retroactivamente, desconociendo -hasta finales de mayo- sus condiciones reales. Adicionalmente, el pasado 13 de mayo, el Ministerio ha excluido a la cogeneración -y al autoconsumo- del “mecanismo de topado del gas” (RDL 10/2002) que reconoce a los ciclos combinados un precio de gas de 80 €/MWh mientras propone a los cogeneradores reconocernos un coste del mismo gas a 50 €/MWh, alterando y distorsionando la competencia, contraviniendo el derecho nacional y europeo.
En un complicadísimo entorno para 600 industrias, el RDL 6/2022 y el RDL 10/2022 dejan a la cogeneración en situación de incertidumbre y pérdidas agravada por la ausencia de un marco “en obras”.
ACOGEN pide al MITECO una rápida solución. La cogeneración precisa una regulación justa que no quiebre la operación de nuestras industrias e imposibilite la llegada de esos 800 millones de euros en inversiones que atraerán las subastas en una primera convocatoria a celebrar este año.
El sobrevenido limbo regulatorio hace que numerosas instalaciones estén reduciendo su operación ante la imposibilidad de asumir el riesgo regulatorio que las puede llevar a números rojos. El 20% de caída de la producción en abril es el reflejo de que no acertar con la regulación energética de la cogeneración puede pasar una enorme factura industrial al país. La regulación energética debe atender, cuidar y priorizar a la industria en esta crisis energética al igual que están haciendo todos los países de la UE.
Junio será crucial para la cogeneración y sus industrias asociadas. Los industriales están interesados por las subastas -o lo estaban hasta ahora- porque no hay mejor alternativa para la transición energética de la industria calorintensiva. Toda la larga cadena de suministros e industrias esperan expectantes para invertir y mejorar sus cogeneraciones. El Ministerio debe ser consciente de que el resultado de la regulación para este año será clave para que las empresas decidan si siguen apostando e invirtiendo en nuestro país o no lo hacen y deslocalizan o impulsan sus plantas en otros países. Para esta significativa parte de nuestro tejido industrial es vital que se conozca pronto el marco definitivo. La competitividad del 20% de los productos fabricados en nuestro país y su futuro dependen de esta decisión regulatoria.