El consumo mundial de energía repunta un 6% en 2021

El petróleo sigue siendo el combustible más utilizado, las renovables continúan su carrera ascendente y las emisiones de carbono aumentan con China a la cabeza

La demanda mundial de energía primaria ha experimentado un fuerte repunte en 2021, de cerca de un 6%, impulsada por una rápida recuperación de la actividad económica a medida que la efectividad de las vacunas ha permitido una relajación de las restricciones en muchas partes del mundo, tal y como refleja el último informe estadístico de bp publicado a finales de junio. Esta situación, revierte con creces la fuerte caída que sufrió el consumo de energía en 2020. De hecho, el informe de bp estima que el uso de energía primaria en 2021 será más de un 1% superior al nivel de 2019.

La otra cara de la moneda es que la caída pronunciada de las emisiones de carbono que se vieron en 2020, ha sido temporal. En 2021, las emisiones de carbono equivalente de la energía (incluido el metano), los procesos industriales y la quema, han aumentado un 5,7% respecto al año anterior, acercándose casi a los 39.000 millones de toneladas.

El 51,3% del total de emisiones se produjo en Asia Pacífico, con China como el país más contaminante de la región, con más de 12.000 millones de toneladas emitidas. El 15,9% del total de emisiones se produjeron en América del Norte, con EEUU a la cabeza con casi 5.200 millones de toneladas emitidas. Europa y la antigua Eurasia representaron el 18% del total de emisiones, siendo Rusia el país más contaminante con 2.172 millones de toneladas de CO2, seguido de Alemania y Turquía.

Por tipo de combustible, el informe de BP indica que el petróleo continuó siendo el más utilizado en 2021, representando casi un tercio del mix energético mundial, un año en el que el barril de brent registró su precio más alto desde 2015, marcando 70,91 dólares de media. El consumo de crudo aumentó en 5,3 millones de barriles diarios el pasado año, pero permaneció 3,7 millones de b/d por debajo de los niveles de 2019. La mayor parte del crecimiento provino de la gasolina (1,8 millones de b/d) y del diésel (1,3 millones de b/d), mientras que la demanda de petróleo relacionada con la aviación estuvo un 33% por debajo de los niveles de 2019. Por regiones, el mayor crecimiento tuvo lugar en EEUU (1,5 millones de b/d), China (1,3 millones de b/d) y la UE (570.000 b/d).

Por el lado de la oferta, la producción mundial de petróleo aumentó en 1,4 millones de b/d en 2021, siendo los países que forman parte de la OPEP+ los responsables de más de las tres cuartas partes de dicho aumento. Libia (840.000 b/d), Irán (540.000 b/d) y Canadá (300.000 b/d) registraron los mayores aumentos, mientras que Nigeria (-200.000 b/d), Reino Unido (-170.000 b/d) y Angola (-150.000 b/d) experimentaron los mayores descensos.

Con respecto a las refinerías, su rendimiento aumentó en 3,6 millones de b/d en 2021 (+ 4,8%), mientras que la capacidad de las refinerías se redujo por primera vez en más de 30 años en más de 400.000 b/d, impulsada por una fuerte bajada en los países de la OCDE (1,1 millones de b/d). Como consecuencia, la capacidad de refino en estos países estuvo en su nivel más bajo desde 1998.

El carbón sigue ocupando la segunda posición en el mercado, con una participación en el mix de energía primaria del 27% en 2021, un año caracterizado por un aumento drástico del precio de este combustible, con un promedio de 121 $/t y el precio del marcador asiático marcando 145 $/t de media, el más alto desde 2008. El consumo de carbón creció un 6,3% en 2021, hasta los 160 Exajulios (EJ), ligeramente por encima de los niveles de 2019 y su nivel más alto desde 2014. China e India representaron más del 70% del crecimiento de la demanda, con un aumento de 3,7 y 2,7 EJ, respectivamente.

Por su parte, la producción mundial de carbón igualó el consumo, con un aumento en la oferta de 440 millones de toneladas. China e India representaron gran parte del aumento en la producción -que se consumió, en gran medida, internamente-, así como Indonesia. En particular, tanto Europa como América del Norte mostraron un aumento en el consumo de carbón en 2021, después de casi 10 años de caídas consecutivas.

El gas natural y las renovables, en ascenso

El gas natural ha mantenido en 2021 su peso en el mix energético en el 24%, un año en el que los precios de este combustible han batido récords en las tres principales regiones gasíferas. A pesar de este contexto, la demanda mundial de gas natural ha crecido un 5,3% el pasado año, recuperándose por encima de los niveles prepandemia y cruzando la marca de los 4 tcm por primera vez, con China y Rusia como países donde más creció el consumo. La producción de gas también creció un 4,8% (123 bcm), con Rusia y EEUU a la cabeza.

El suministro de GNL también aumentó un 5,6% (+26 bcm) hasta los 516 bcm en 2021. Las exportaciones de GNL de EEUU aumentaron en 34 bcm, lo que representa la mayor parte de los nuevos suministros y compensa las caídas de otros exportadores de la Cuenca del Atlántico. China superó a Japón como el mayor importador de GNL del mundo y representó cerca del 60% del crecimiento de la demanda mundial de GNL en 2021.

El consumo de energía renovable (excluida la hidroeléctrica) aumentó 5,1 EJ en 2021, lo que supone un crecimiento anual del 15% y supera al de cualquier otro combustible. Su participación en el mix energético ronda el 13%. La capacidad solar y eólica continuó creciendo, aumentando en 226 GW, cerca del récord de 236 GW de 2020. China sigue siendo el principal impulsor de este crecimiento, representando alrededor del 36% y del 40% de las adiciones de las capacidades eólica y solar global, respectivamente.

Respecto a la generación hidroeléctrica, ésta disminuyó cerca de un 1,4% en 2021, la primera caída desde 2015, mientras que la generación nuclear subió un 4,2%, el aumento más fuerte desde 2004, liderada por China.