Desafíos para el almacenamiento de energía en la próxima década

E n la Estrategia Española de Almacenamiento de Energía, se ha cuantificado la necesidad de que el sistema energético español cuente en 2030 con 20 GW y 30 GW en 2050 de potencia instalada de sistemas de almacenamiento con el fin de cumplir los objetivos del PNIEC y la Estrategia de Descarbonización a largo plazo. El cumplimiento de esos objetivos, de diferente naturaleza, condicionará los próximos diez años. Concentración tecnológica en las tecnologías maduras: El bombeo hidráulico y las baterías de Ion Litio son tecnologías maduras que presentan sus propias limitaciones para un despliegue rápido de la magnitud que se pretende en la Estrategia de Almacenamiento. Para superar este obstáculo, será necesario disponer de otras tecnologías de almacenamiento a gran escala, actualmente insuficientemente maduras, y alcanzarán competitividad a medida que se vayan reduciendo sus costes de fabricación y de operación en un proceso de despliegue común a cualquier tecnología conocido como curva de aprendizaje. Esa evolución de la curva de aprendizaje se producirá con las nuevas instalaciones que necesitarán de incentivos económicos durante un periodo de transición.

Incentivos para la inversión en instalaciones de almacenamiento: Incluso en entornos que ya han desarrollado regulatoriamente la prestación de servicios de ajuste, como Australia y California, no es posible que una planta de almacenamiento de energía a gran escala sea rentable con un solo tipo de servicios de red: se necesita combinar varias fuentes de ingresos. En la próxima década, la aparición de nuevos servicios complementarios asociados a la fuerte penetración de renovables mejorará la viabilidad económica del almacenamiento de energía. Transformación de las cadenas de suministro: La pandemia nos ha obligado a considerar aspectos críticos de las cadenas logísticas y de valor. La concentración de la fabricación de componentes críticos en unos pocos países supondría, en el caso de otra pandemia, que las cadenas de fabricación y logística no fueran capaces de proporcionar el despliegue de instalaciones de almacenamiento energético necesarias para el cumplimiento de los objetivos de integración de renovables. El desarrollo de la industria local de segunda vida de los sistemas de almacenamiento puede aliviar muchos de los problemas generados en las cadenas de suministro. La tecnología como factor de presión geopolítica: La guerra de Ucrania supone un hito en el proceso de transformación del equilibrio de poder mundial. En un entorno de confrontación, los países que dispongan de tecnología y de capacidad de fabricación usarán esas fortalezas para debilitar a sus oponentes. Contar con tecnología propia es un elemento de independencia. Cada país deberá elegir si prefiere asumir los costes elevados de disponer de su tecnología o si opta por emplear tecnología ajena con el coste geopolítico de la dependencia.